Agencias.- El Pleno del Congreso rechazó esta madrugada, por 65 votos, el proyecto de reforma constitucional para realizar elecciones generales en octubre próximo. En consecuencia, no se atendió el reclamo de grandes sectores ciudadanos para que se recorte el mandato de la presidenta de la República, Dina Boluarte, al 31 de diciembre.
De haber aprobado el texto sustitutorio presentado por el titular de la Comisión de Constitución, Hernando Guerra García, al Pleno, el sucesor de Boluarte habría asumido el cargo el 1 de enero de 2024 hasta el 28 de julio de 2029.
Asimismo, los congresistas y parlamentarios andinos habrían terminado su período el 30 de diciembre para que sus reemplazantes entren en funciones el 31 de diciembre de 2023 hasta el 26 de julio de 2029. Pero todo eso quedó en el papel.
Una alianza tácita entre los bloques de la extrema derecha y la extrema izquierda impidió la aprobación de la propuesta que solo obtuvo el aval de 45 legisladores. Otros 2 se abstuvieron.
En el curso del debate, los distintos bloques formularon una serie de sugerencias. En algunos casos para que los comicios generales se lleven a cabo no en octubre sino dentro de cuatro meses, es decir, en abril de este año. En otros casos el planteamiento fue incluir en el documento la realización de un referéndum sobre la convocatoria a una Asamblea Constituyente.
Una vez más, desde uno y otro bloque hubo recriminaciones. Avanza País reiteró que el nuevo cronograma electoral, sin las reformas políticas necesarias, “perpetuará” la crisis, mientras que Renovación Popular, a través de Jorge Montoya, ratificó su oposición alegando que debilita la institucionalidad. Además, advirtió que presentarían una acción de inconstitucionalidad ante el Tribunal Constitucional si era aprobada la norma. Algunos bloques de izquierda como Perú Libre, en tanto, insistieron en condicionar su aval a referéndum sobre la Constituyente y la renuncia de la presidenta Dina Boluarte. Alianza para el Progreso, a su turno, dijo que avalaría el cambio del cronograma electoral y que buscará llegar a acuerdos sobre reformas políticas mínimas que garanticen la elección de mejores autoridades. Finalmente, empero, el proyecto no fue aprobado aunque se presentó una reconsideración que se discutirá este lunes.
Más temprano, la presidenta Dina Boluarte dejó en manos del Parlamento la decisión final respecto del adelanto de elecciones generales. “Pónganse de acuerdo, digan tal día (son) las elecciones y en ese instante estaremos convocando para que libremente, democráticamente, sin chantajes, el pueblo peruano pueda elegir a nuevos congresistas y una nueva fórmula presidencial y en el 2023 nos iremos todos”, subrayó.
La mandataria, además, se distanció de la “izquierda radical” que –dijo– pone como condición del adelanto pasar por la Asamblea Constituyente. “Es una justificación más para poder radicalizar y seguir ensangrentando el país”, acotó.