ANF.- En los últimos días, dos operativos realizados por la Aduana Nacional y el Comando Estratégico Operacional de Lucha Contra el Contrabando (CEO – LCC) lograron decomisar más de 3.500 cajas de cigarrillo ilícito, con un valor total que supera los Bs 6,8 millones.
El primer operativo se desarrolló el 16 de marzo, en el municipio cochabambino de Sacaba. A denuncia de la Policía Caminera, el Grupo de Reacción Inmediata Aduanera (GRIA) interceptó tres vehículos en el exretén de Chiñata: dos camiones Volvo F12 cargados con cigarrillos de contrabando y un vehículo tipo vagoneta marca Toyota 4Runner, este último tenía la función de alertar a los contrabandistas sobre los controles aduaneros.
El personal aduanero detectó que los camiones transportaban 2.400 cajas de cigarrillo ilegal de procedencia paraguaya, de las marcas Golden Beach, Carnival y 10/20. El cargamento estaba valuado en más de Bs 3,8 millones.
“Este tipo de cigarrillos no cuentan con el timbre oficial y no tienen ningún documento que acrediten la legal importación al país”, señaló Hugo Domínguez, gerente regional de la Aduana Cochabamba.
En ese operativo se aprehendió a tres personas de sexo masculino y serán sometidos a un proceso por el delito de contrabando, tomando en cuenta que la mercadería decomisada supera las 200.000 Unidades de Fomento a la Vivienda (UFV).
El segundo operativo se realizó la madrugada del 18 de marzo, militares del CEO – LCC intervinieron dos camiones de la marca Volvo, en la carretera Tiguipa-Villamontes (zona La Vertiente), Tarija. Los motorizados cargaban más de 1.100 cajas de cigarros de contrabando de las marcas Hills y Fox, valuados en aproximadamente Bs 3 millones.
El personal del CEO – LCC fue emboscado por personas que buscaban evitar el decomiso de la mercadería. Sin embargo, los militares lograron reducir a los contrabandistas y trasladaron los camiones a instalaciones de la Aduana Nacional en Yacuiba.
Las autoridades alertaron que estos productos conllevan un mayor riesgo sanitario para los consumidores porque no llevan sellos ni timbres que certifiquen su consumo.
Las marcas que más ingresan de contrabando al país, según los reportes oficiales, son Hills y 10/20.