Este miércoles, los comercializadores de carne de pollo en Cochabamba paralizaron sus actividades por 24 horas en rechazo al incremento de precios y a los bloqueos en rutas, que afectan el abastecimiento de productos y encarecen los insumos en los mercados locales. La medida se adoptó luego de un encuentro departamental en el que se abordó la situación crítica del sector, afectado tanto por las dificultades de transporte como por la reducción en las ventas debido al alto costo del producto.
“Estamos pidiendo al Gobierno que intervenga y desbloquee las carreteras; solo queremos trabajar”, declaró Edwin Hilari, presidente de la Asociación Departamental de Comercializadores de Carne de Pollo de Cochabamba (Adecopo), en declaraciones a Unitel.
El dirigente subrayó que el paro es una primera medida, advirtiendo que, de no haber acciones para liberar las vías interdepartamentales, el sector considera ampliar la protesta a 48 horas, con apoyo nacional.
Causas y contexto de la protesta
El costo del pollo en Cochabamba ha alcanzado niveles inusualmente altos, llegando a 22 bolivianos por kilo en el mercado mayorista, lo que significa que los minoristas deben venderlo a 23 o 24 bolivianos. La situación es paradójica, ya que Cochabamba es un departamento productor, y, según Adecopo, los precios deberían ser más bajos en comparación con otras regiones. Sin embargo, los bloqueos han generado especulación y falta de control en el mercado, que han llevado a este aumento.
“Es inaceptable que el pollo aquí sea más caro que en La Paz; se supone que debería ser al revés. Los bloqueos y la falta de regulación han generado esta situación, y necesitamos soluciones urgentes”, explicó Hilari.
El paro departamental se desarrolla con vigilancia de los puestos de venta para asegurar que ningún comerciante atienda. De continuar la falta de respuesta por parte de las autoridades, se ha programado un ampliado nacional para el fin de semana, donde se decidirá si se extiende la medida de protesta a nivel nacional.