La laguna de Corani, ubicada en el municipio de Colomi de la provincia Chapare del departamento de Cochabamba, comenzó a secarse debido a la sequía, que, según las proyecciones del Servicio Nacional de Meteorología e Hidrología (Senamhi), se prolongará hasta marzo del próximo año.
La escasez de lluvia en el departamento ha generado preocupación en autoridades y pobladores no solo de Colomi, sino también de otros 13 municipios de Cochabamba, donde la sequía está provocando pérdidas de cultivos y mortandad de animales.
“No ha llovido desde hace varios meses”, manifestaron comunarios de Colomi a la televisora Unitel al referirse al panorama desalador que existe en la laguna de Corani, cuyo espejo de agua y centro turístico ha reducido dramáticamente su caudal.
Algo similar se vive en el municipio de Aiquile, cono sur cochabambino, donde la sequía ha provocado que varios animales, principalmente ganado vacuno, mueran producto de la falta del líquido elemento.
Las autoridades municipales han declarado desastre natural para gestionar la cooperación de la Gobernación de Cochabamba y del Gobierno central, a través del Viceministerio de Defensa Civil, cuyo titular, Juan Carlos Calvimontes, anunció el envío de cisternas con agua para mitigar los efectos de la aguda sequía.