La dirigencia de la Confederación Sindical de Choferes de Bolivia se reunirá este viernes en Tarija en un ampliado nacional con el objetivo de analizar los graves perjuicios y pérdidas ocasionadas por los problemas en el abastecimiento de diésel en el país. Durante la asamblea, los representantes de los conductores analizarán la posibilidad de tomar medidas de presión si el Gobierno no establece soluciones inmediatas.
El secretario ejecutivo de la confederación, Lucio Gómez, anunció en una entrevista con Unitel que no se descarta un paro de actividades. “Va a ser un ampliado nacional con participación de los nueve departamentos del país y así con sus once federaciones, con la participación del urbano, interprovincial, interdepartamental, de carga y pasajeros, como internacional. Están concentrados precisamente por un problema grande, el cual es el desabastecimiento del diésel”, afirmó.
Según Gómez, la situación actual es insostenible. Los conductores se ven obligados a formar largas filas en las estaciones de servicio de todo el país, lo que ha generado un malestar creciente en el sector. “No se puede tolerar más”, enfatizó.
El dirigente responsabilizó al ministro de Hidrocarburos y al presidente de YPFB por la crisis, denunciando que “no existe ni siquiera el incremento de los volúmenes que tenía cada departamento”. En sus declaraciones, lamentó que las autoridades continúen asegurando que los volúmenes de diésel son suficientes, a pesar de la evidente escasez.
Además del tema del desabastecimiento de diésel, en el ampliado de Tarija los choferes abordarán otros problemas que afectan al sector, como los controles aduaneros, las inspecciones de la Dirección Nacional de Prevención de Robo de Vehículos (Diprove) y cuestiones impositivas. Estos asuntos han sido motivo de preocupación constante para los conductores.
“Seguramente se va a tomar algunas medidas que realmente ya es insoportable, eso estamos advirtiendo al ministro de Hidrocarburos y al presidente de Yacimientos,” concluyó Gómez, dejando entrever que los bloqueos y otras formas de protesta podrían ser inminentes si no se llega a una solución pronta y efectiva.