El sector cañero del Norte Integrado ha dado un ultimátum de cuatro días al Gobierno nacional para solucionar las fallas en la distribución de diésel, según informó Beltrán Flores, dirigente de la Unión de Cañeros del ingenio Unagro. Esta decisión fue tomada en una asamblea celebrada recientemente, donde se discutió la problemática persistente del abastecimiento de este carburante crucial para la producción cañera.
Flores advirtió que, de no encontrarse una solución oportuna, el sector cañero se unirá a las movilizaciones del transporte pesado, que también enfrenta una emergencia debido a las interrupciones en el suministro de combustible. Los productores han tenido que paralizar sus actividades para hacer filas en los surtidores, donde el diésel se agota rápidamente, generando incertidumbre y afectando la continuidad de sus labores.
La Comisión Nacional de Productores Cañeros de Bolivia (Concabol) ha señalado que la zafra está siendo perjudicada, ya que la materia prima no puede ser transportada a los ingenios sucroalcoholeros debido a la falta de diésel, interrumpiendo así la cadena logística. “El perjuicio al país es demasiado grande y son las autoridades de Hidrocarburos las culpables. Este problema pone en riesgo la actividad productiva, particularmente en el sector agroindustrial cañero, ya que el diésel es un combustible esencial para sus operaciones”, según cita el portal de Unitel.
Este escenario ha puesto al sector en estado de emergencia. La falta de acceso oportuno al diésel, sumada a la sequía que afecta a los campos cruceños, está encareciendo la cosecha, el transporte y toda la cadena productiva. Los cañeros esperan que el Gobierno tome medidas inmediatas para evitar un mayor impacto en la economía agroindustrial del país.