La Cámara Automotor Boliviana (CAB) alertó este domingo que en el país hay más de dos millones de vehículos convencionales que no están preparados para consumir combustible con más del 10-12% de etanol.
El pronunciamiento de la entidad, con sede en la ciudad de Santa Cruz de la Sierra, se conoce tres días después de hacerse público la promulgación del Decreto Supremo N° 5135 que autoriza el incremento gradual de biodiésel y alcohol anhidro con combustibles fósiles hasta un 25%.
La medida preocupa a conductores y usuarios -sobre todo de vehículos nuevos-, puesto que podrían perder la garantía del fabricante del vehículo, según se refleja en los manuales entregados por las importadora de motorizados.
Al respecto, la Cámara Automotor Boliviana (CAB), a través de un comunicado, manifestó que de colocar 25% de etanol a los vehículos convencionales, los fabricantes anularían la garantía sobre los motores (3 años o 100.000 km de recorrido). La decisión se justifica por los daños y fallas prematuras que podrían presentarse en el motor.
“Esta situación generaría un grave problema a los usuarios de los vehículos y distribuidores oficiales de cada marca en Bolivia”, se lee en el comunicado divulgado este domingo por la entidad que representa a los importadores de automóviles.
Según la CAB, el parque automotor boliviano está compuesto por más de dos millones de vehículos convencionales que no están preparados para consumir combustible con más del 10-12% de etanol, lo cual podría ocasionar severos daños a los motores, afectando directamente al patrimonio de sus propietarios.
“Valoramos la iniciativa del Gobierno por promover el uso del etanol para generar un mayor desarrollo del sector productivo en la producción de un combustible más limpio y renovable que, además, contribuya a la reducción de la dependencia de combustibles fósiles y el ahorro de divisas; sin embargo, creemos firmemente que es esencial abordar esta transición de manera cuidadosa y planificada”, se lee en el comunicado.