Luego de un proceso de casi tres años, la boliviana Magalí logró evitar la pena de muerte en Malasia, pero recibió una sentencia de ocho años de cárcel, tras declararse culpable por el delito de portación de drogas, informó este martes el canciller Rogelio Mayta.
“La boliviana que fue detenida en Malasia en 2019, tras tres años de proceso, finalmente ayer se realizó una audiencia decisiva y la fiscalía aceptó llegar a un acuerdo cambiar la acusación, bajo la condición de que la acusada se declare culpable y la jueza del caso aceptó este cambio de acusación y el proceso continuó por posesión de drogas, que evitó que sea condenada a la pena de muerte”, sostuvo Mayta.
En este caso, la boliviana tenía 23 años cuando fue detenida en septiembre de 2019 en el aeropuerto de Kuala Lumpur, cuando llevaba más de dos kilos de cocaína ocultos en su maleta.
La coterránea fue acusada de tráfico de drogas, cuya pena puede ser de muerte en Malasia, sin embargo, el Estado boliviano hizo gestiones y pudo sostener que la joven era víctima de una red de trata y que la responsable de inducirla al viaje ya había sido detenida en el país.
La Fiscalía malaya aceptó llegar a un acuerdo para cambiar la acusación de tráfico a posesión de drogas, bajo la condición de que la mujer, ahora de 26 años, se declare culpable. En esas condiciones aún podía ser condenada a prisión y recibir azotes.
La defensa argumentó que la boliviana es una mujer joven, no tenía antecedentes penales, y era estudiante de Derecho en el país. Los elementos fueron valorados por la jueza, quien definió dictar una pena de cárcel de ocho años para la boliviana, reconociendo su arrepentimiento en la conducta.
El canciller Mayta llamó a la reflexión por este tema, puesto que muchos bolivianos sucumben ante propuestas que hacen las personas que están vinculadas a delitos de narcotráfico, que las utilizan para transportar cantidades aparentemente pequeñas, pero que pueden generarles situaciones graves, según Erbol.
Señaló que se tiene registradas en servicios consulares como 647 personas de nacionalidad boliviana detenidas, procesadas criminalmente en otros países y que la mayoría son por tráfico de droga.
El 1 de septiembre de 2019, Magalí fue reportada como desaparecida en Cochabamba. La joven fue contactada por redes sociales para un trabajo de modelo en Asia, sin saber que sería extorsionada para llevar droga, paquete por el que está detenida desde 2019 en Malasia.