Los bloqueos en Quillacollo, Cochabamba, cumplen este jueves su segundo día consecutivo, en medio de la protesta de los transportistas urbanos que demandan un incremento en la tarifa del pasaje de Bs 1,20 a Bs 1,50. La medida, iniciada en la madrugada del miércoles, ha paralizado la circulación vehicular y afectado las conexiones viales con el occidente del país.
Los choferes han bloqueado las principales vías con sus propios vehículos, impidiendo el paso tanto de transporte pesado como liviano. Como consecuencia, cientos de ciudadanos se ven obligados a recorrer largas distancias a pie en busca de alternativas de movilización. Además, las salidas hacia La Paz, Oruro y Potosí han sido suspendidas, mientras que algunos buses intentaron utilizar rutas alternas que no cuentan con autorización ni condiciones adecuadas, poniendo en riesgo a los pasajeros.
Los transportistas han advertido que mantendrán el bloqueo de manera indefinida hasta que las autoridades municipales aprueben el incremento tarifario. En respuesta, el Concejo Municipal de Quillacollo tiene previsto sesionar este jueves para tratar el conflicto, lo que podría definir el curso de las próximas horas.
El impacto de la medida es significativo, afectando no solo a los usuarios del transporte público, sino también a comerciantes y transportistas de carga, quienes han visto interrumpidas sus actividades. La solución al conflicto dependerá de las decisiones que adopten las autoridades locales en las próximas horas.