El presidente Luis Arce inició este jueves, en Chimoré, departamento de Cochabamba, los trabajos de “erradicación y racionalización de coca excedentaria gestión 2023” y llamó a la comunidad internacionales sumarse a esta lucha soberana del pueblo boliviano para combatir al narcotráfico.
“Cuando hablamos de la hoja de coca en nuestro país, hablamos de uno de los más grandes símbolos de la bolivianidad; hablamos de la resistencia, pero también de la unidad, la lucha y de la dignidad del pueblo boliviano”, aseveró el jefe de Estado.
Recordó que en épocas neoliberales se aplicó un modelo fallido de erradicación, donde se priorizaba el uso de la fuerza contra el pueblo cocalero y campesino, modelo que provocó la muerte de decenas de bolivianos.
En el gobierno del MAS (2006) se cambiaron las acciones y hoy se tiene un propio sistema de erradicación y de lucha soberana contra el narcotráfico.
“Las cosas han cambiado, en nuestro gobierno, tras recuperar la democracia en 2020, los datos y estadísticas fueron muy elocuentes. Se han superado las metas del año 2021 y 2022, de 9.000 a 10.000 hectáreas y hoy nos volvemos a poner metas para este 2023, superar las 10.000 hectáreas”, afirmó Arce.
En ese contexto, lamentó que en países hermanos como Perú y Colombia se haya incrementado la producción de coca excedentaria, indicador que llama mucho la atención al ser Bolivia un país comprometido en la lucha contra el narcotráfico.
“Pedimos al mundo sumarse a esta lucha, como lo hacemos en Bolivia de manera soberana. De esta manera sí vamos a poder lograr éxitos en el ámbito internacional, caso contrario el esfuerzo que hace nuestro país no va ser tan plasmado en resultados”, indicó.
Por otro lado, aclaró que como Gobierno se encaran diversos programas de apoyo a la producción agrícola para dar paso al ansiado proceso de industrialización de materias primas, como la hoja de coca.
Informó que en Sacaba (Cochabamba) se construye la planta procesadora de coca y se implementará otra en los Yungas de La Paz.
“La industrialización pasa a ser un elemento fundamental porque la hoja de coca tiene 14 alcaloides, y nosotros debemos aprovechar todos ellos para beneficio de la salud y la alimentación del pueblo boliviano”, resaltó Arce.
De acuerdo con el jefe de Estado, estas acciones permitirán reflexionar, más adelante, sobre el excedente de coca para garantizar la materia prima en función a la necesidad de las plantas industriales.