Un operativo conjunto entre la Agencia Nacional de Hidrocarburos (ANH) y la Policía Boliviana resultó en la incautación de más de 500 litros de combustible, entre gasolina y diésel, así como 100 garrafas de Gas Licuado de Petróleo (GLP) en el municipio de Quillacollo. La acción se enmarca en una serie de medidas para combatir el comercio irregular de estos productos en la región.
Wendy Villarroel, directora distrital de la ANH, detalló que el operativo se llevó a cabo el lunes y ha sido parte de un esfuerzo intensificado para controlar el almacenamiento y distribución ilegal de combustibles. “Ayer se realizó un operativo en Quillacollo y se confiscaron más de 100 garrafas y 500 litros de diésel y gasolina”, informó Villarroel.
El combustible y las garrafas decomisados fueron enviados a la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (Felcc) para su resguardo, y posteriormente serán trasladados a Yacimiento Petrolífero Fiscales Bolivianos (YPFB). En YPFB se llevará a cabo un control de calidad para determinar la condición de los productos y su eventual disposición para la comercialización legal.
La investigación preliminar reveló que las garrafas de GLP estaban siendo vendidas a un precio superior al legal: Bs 27 en lugar de Bs 22,50. Este hallazgo subraya la necesidad de vigilancia constante sobre los precios y la distribución de combustibles. Villarroel hizo un llamado a la población recordando que “ninguna persona puede almacenar, transportar o comercializar combustible líquido, ya sea gasolina, diésel o GLP, sin la debida autorización.”
La ANH continúa su labor reguladora para prevenir prácticas ilícitas y garantizar que los precios y la calidad de los combustibles se mantengan dentro de los estándares establecidos.