ABI.- Tres cargamentos que contenían celulares de alta gama, computadoras, partes de armas de fuego, suplementos y prendería procedentes de Miami, Estados Unidos, fueron comisados este jueves por la Aduana Nacional en el Aeropuerto Internacional de El Alto, aledaña a La Paz.
“Debido a que la mercancía no contaba con la documentación de respaldo para su ingreso lícito al país, se procedió al comiso total de los artículos, en el marco de la lucha contra el contrabando”, declaró el gerente regional de la Aduana La Paz, Antonio Martínez.
El valor declarado asciende a Bs 38.000, sin embargo, una vez concluya el aforo de cada uno de los despachos, se determinará el valor real para toda la mercadería incautada como contrabando técnico, con un peso de más de una tonelada.
En controles de rutina a la mercancía que arriba en vuelos internacionales, el sistema informático de la Aduana Nacional seleccionó estos tres envíos en canal rojo, por lo que los funcionarios procedieron a la revisión física de la mercancía para comprobar si esta coincidía con la Declaración de Mercancías de Importación (DIM) con la que buscaba ingresar al país, al llevar a cabo esta labor, se verificó la incompatibilidad entre la mercadería y sus documentos.
“En este caso, hemos podido identificar tres despachos aduaneros bajo lo que nosotros llamamos el contrabando técnico, es decir que la descripción de la mercancía en la declaración de importación (DIM) refiere una mercancía como autopartes, pero en el aforo los técnicos pudieron identificar otro tipo de mercancías. Tenemos celulares de alta gama, laptops, equipos electrónicos, implementos médicos, (y otros)”, detalló Mauren Paz, administradora de la Aduana en el aeropuerto de El Alto.
Entre la mercancía también se encontraban esqueletos de armas de fuego, que serán entregados a las instancias competentes para su debido proceso. En lo que respecta a productos cosméticos, estos requieren de una certificación del Servicio Nacional de Sanidad Agropecuaria e Inocuidad Alimentaria (Senasag) que asegure que no representan un peligro para la salud de la población, si estos fueran dañinos, se procederá a su inutilización.