El ministro de Gobierno, Eduardo Del Castillo, informó este lunes que se está elaborando un plan “milimétrico” para ejecutar la orden de aprehensión contra el expresidente Evo Morales. El objetivo, afirmó, es garantizar la seguridad de la población y de las fuerzas policiales involucradas en el operativo.
“Los planes y las órdenes de operaciones que está desarrollando la Policía Boliviana se están diseñando, evaluando y ajustando de manera minuciosa, con el propósito de evitar errores y cumplir con lo dispuesto por la justicia”, declaró Del Castillo durante una conferencia de prensa.
La orden judicial contra Morales surge a raíz de una acusación por el presunto delito de trata de personas, derivada de una relación que el exmandatario habría mantenido con una menor de 15 años, con quien tuvo una hija, según los informes oficiales.
Actualmente, Morales permanece en el trópico de Cochabamba, protegido por organizaciones cocaleras que lo respaldan. Estas bases han denunciado que la orden de captura forma parte de una supuesta persecución política promovida por el gobierno de Luis Arce. En respuesta, han advertido que no permitirán la detención del exjefe de Estado.
Del Castillo acusó a Morales de aprovechar la coyuntura para ganar protagonismo político, promoviendo conflictos sociales y posicionándose como víctima de persecución. Asimismo, recordó que el expresidente tiene una alerta migratoria vigente que le impide abandonar el país, con la instrucción de ser arrestado en caso de intentar salir del territorio nacional.
El caso mantiene a Bolivia en un clima de alta tensión política, en un contexto de creciente polarización social. Mientras tanto, las autoridades aseguran que trabajan para cumplir con el mandato judicial y garantizar el respeto al Estado de derecho.