La silpanchería “Orejas de Elefante”, un ícono de la gastronomía cochabambina, inauguró su tercera sucursal, esta vez en Quillacollo, fortaleciendo su presencia en el departamento. Este paso forma parte de su estrategia de expansión que busca llevar el característico sabor de sus platos a más comensales.
El nuevo local se suma a los ya establecidos en la avenida Libertador Bolívar y en la Plaza Colón, aperturas que marcaron hitos para la silpanchería en los últimos años. Según Jhoselyn Pinto, gerente propietaria, la apertura en Quillacollo responde a la alta demanda y al compromiso de la marca con sus clientes. “Este es un paso más hacia el crecimiento. Queremos que más personas disfruten de nuestra propuesta gastronómica”, señaló.
Además, Pinto adelantó que la expansión no se detendrá aquí. La empresa proyecta abrir una cuarta sucursal en la zona sur de Cochabamba, y a largo plazo, llegar al oriente boliviano, comenzando por Santa Cruz, con el objetivo de consolidarse como un referente nacional del silpancho.
Fundada en 1976 por María Luisa Salvatierra, quien inició vendiendo pequeños volúmenes de silpancho, “Orejas de Elefante” es reconocida por la calidad de sus platos, el tamaño distintivo de sus porciones y el sabor auténtico que ha conquistado a varias generaciones.
Con casi 50 años de tradición, este emprendimiento continúa fortaleciendo su legado como parte del patrimonio culinario de Cochabamba y reafirmando su compromiso con la calidad y la satisfacción de sus clientes.