DW.- Rusia derribó este domingo 34 drones ucranianos dirigidos a Moscú, indicó el Ministerio de Defensa, en el mayor ataque contra la capital rusa desde el inicio del conflicto en 2022.
El ataque obligó el cierre temporal de tres aeropuertos, hirió a una mujer de 52 años y provocó el incendio de dos viviendas en la localidad de Rámenskoye, según las autoridades.
Mientras que la capital ucraniana Kiev es blanco habitual de ataques masivos rusos con drones y misiles, los ataques contra Moscú son mucho menos frecuentes.
El Ministerio de Defensa precisó que la defensa antiaérea rusa había derribado un total de 70 drones ucranianos en seis regiones, incluyendo los 34 en la zona de Moscú. El gobernador de la región capitalina Andréi Vorobyov declaró este domingo que el ataque con drones había sido “masivo”.
El Ministerio de Defensa ruso había declarado anteriormente que había derribado un total de 23 drones ucranianos sobre las regiones de Briansk, Rostov, Bélgorod y Kursk, todas ellas fronterizas con Ucrania y donde los ataques con drones son más frecuentes.
Ucrania afirma que sus ataques, que a menudo tienen como objetivo instalaciones energéticas, son una respuesta a los bombardeos rusos sobre su territorio desde el inicio de la invasión rusa en febrero de 2022.