La ruta entre Santa Cruz de la Sierra y el municipio de Warnes amaneció bloqueada este viernes, en una medida de presión impulsada por los mototaxistas que exigen soluciones urgentes a la escasez de combustible. La protesta comenzó cerca de la tranca de peaje, y se extendió desde Warnes hacia Montero y Yapacaní, generando una paralización significativa del tráfico en la zona del Norte Integrado.
El sector de mototaxistas manifestó que la falta de gasolina y diésel afecta gravemente sus actividades diarias y que incluso en el mercado informal el combustible se encuentra en cantidades limitadas y a precios elevados. Según un dirigente local, esta situación ha obligado al gremio a tomar acciones de protesta, buscando respuestas inmediatas de las autoridades.
La escasez de combustible también ha puesto en alerta a otros sectores económicos esenciales en la región. Productores agropecuarios, avícolas, porcinocultores y lecheros han declarado estado de emergencia debido al impacto que el desabastecimiento tiene sobre sus operaciones. En solidaridad con la protesta de los mototaxistas y ante la falta de respuesta efectiva, estos sectores han convocado a un “galonazo” frente a las instalaciones de Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB), demandando una solución sostenible que garantice el abastecimiento de combustible.
Respuesta gubernamental
Ante la presión creciente, el Gobierno anunció que a partir de este sábado se normalizaría el suministro de gasolina y diésel en la región. No obstante, las largas filas de vehículos que se han observado en las estaciones de servicio durante los últimos días reflejan la magnitud del problema y la urgencia de una respuesta definitiva.
El bloqueo no solo afecta a los mototaxistas, sino también a la economía regional, que depende en gran medida de un transporte fluido para el traslado de productos agrícolas y pecuarios. La falta de combustible amenaza con impactar la productividad de Santa Cruz y, en última instancia, el abastecimiento de alimentos y otros productos en el mercado local.
Mientras se espera que la situación se normalice, los sectores en emergencia y la población exigen a las autoridades una solución que no solo sea temporal, sino que resuelva de fondo la problemática de abastecimiento de combustible en una región clave para la economía boliviana.