El presidente Luis Arce se reunirá la próxima semana con los representantes de la Cámara Agropecuaria del Oriente (CAO) en Santa Cruz, en un esfuerzo por resolver los problemas de abastecimiento de diésel tras los bloqueos impulsados por el sector evista. La viceministra de Comunicación, Gabriela Alcón, informó que el objetivo es restablecer cuanto antes el suministro y mitigar el impacto de los cortes de distribución en la cadena productiva.
Esta reunión forma parte de la mesa de trabajo multisectorial instalada por Arce el pasado jueves en la Casa Grande del Pueblo, en la que participaron representantes de los sectores productivos, industriales y del transporte. En este espacio, se priorizó la entrega de carburantes esenciales para el sector agropecuario y el transporte, con un plan que busca asegurar un suministro constante en medio de la escasez generada por 24 días de bloqueos que afectaron principalmente a Cochabamba y a la conexión entre el oriente y el occidente del país.
“Vamos a escuchar a la CAO en Santa Cruz para atender las necesidades del sector y proponer soluciones conjuntas”, señaló Alcón, añadiendo que el diálogo se enfocará en los efectos de los recientes bloqueos y en las acciones necesarias para garantizar el abastecimiento de diésel durante la campaña de siembra y cosecha.
La CAO, que no asistió a la mesa de trabajo de esta semana, ha sugerido la liberación de la importación y comercialización de carburantes como medida para enfrentar la situación de escasez. Según Alcón, el Gobierno considera viable analizar esta propuesta en la próxima reunión. Asimismo, aseguró que el suministro de diésel se estabilizará gradualmente, y destacó la reciente decisión de enviar a Armin Dorgathen, presidente de YPFB, a Arica para supervisar la descarga de combustible importado.
El presidente Arce también dispuso el traslado inmediato de diésel a las zonas productivas, ante la urgencia de responder a la alta demanda que existe en el agro en este momento crítico del ciclo agrícola. Esta respuesta es clave para asegurar la continuidad de la producción en el sector, en un contexto donde las dificultades en el suministro podrían afectar tanto a la siembra como a la cosecha en todo el país.