La Dirección Departamental de Educación (DDE) de Cochabamba evalúa replegar a los maestros del Trópico en caso de confirmarse que están siendo obligados a participar en los bloqueos organizados por grupos afines al movimiento evista. Edgar Veizaga, titular de la DDE, advirtió que no permitirán que los docentes se vean forzados a abandonar sus funciones para apoyar protestas en la región.
La situación en el Trópico es crítica, ya que los bloqueos, que se mantienen desde hace 22 días en diversas carreteras de Cochabamba, dificultan el acceso a recursos básicos. Esto ha llevado a que los maestros deban organizarse para salir periódicamente a la ciudad en busca de alimentos y dinero, en medio de la falta de cajeros y servicios bancarios, suspendidos por la presión de los bloqueadores. Según Veizaga, esta salida organizada es esencial para que los docentes puedan abastecerse y garantizar la continuidad de las clases presenciales, pese a las adversidades.
“No podemos permitir que los docentes sean coaccionados para bloquear. Los maestros están para enseñar, no para participar en acciones políticas”, afirmó. La DDE está a la espera de que se confirme esta denuncia y, de ser así, actuarán de inmediato para evitar que los profesores sean involucrados en los conflictos.
Impacto de los bloqueos en la educación y la economía local
La continuidad de los bloqueos también ha afectado el pago del Bono Juancito Pinto, un beneficio estatal que apoya la permanencia escolar en zonas rurales y urbanas. Según Veizaga, los estudiantes del Trópico y de otras áreas como Pocona, Vacas, y Tiraque, donde los bloqueos persisten, no han podido cobrar este bono debido a la inactividad de los bancos. Sin embargo, tras el levantamiento parcial de bloqueos en algunas rutas, se espera que el pago se reanude en otras zonas.
Implicaciones para los padres y la comunidad educativa
Este escenario plantea una creciente preocupación entre padres de familia y autoridades, ya que la participación forzada de los maestros en los bloqueos no solo afecta el desarrollo educativo, sino también la estabilidad laboral de los docentes. Además, el impedimento para cobrar el bono perjudica a las familias que dependen de este ingreso para sus hijos. La posible retirada de los maestros del Trópico afectaría a cientos de estudiantes y complicaría aún más el ciclo escolar en esta región.
Las autoridades esperan que los bloqueos se levanten y que la presión hacia los docentes cese, permitiéndoles retomar sus funciones sin amenazas externas.