La Policía, respaldada por fuerzas militares, recuperó el control de la ruta en Mairana, permitiendo el tránsito vehicular después de ocho días de bloqueos. Las autoridades lograron despejar la vía sin enfrentamientos directos con los manifestantes, quienes mantenían interrumpido el paso en demanda de soluciones a la escasez de combustible y dólares, además de denunciar lo que califican como “persecución política” contra el expresidente Evo Morales.
Un despliegue de más de 500 efectivos policiales y 200 militares se movilizó hacia la ruta antigua que conecta a Santa Cruz con los Valles cruceños y Cochabamba. Al llegar, las fuerzas encontraron los puntos de bloqueo vacíos y comenzaron inmediatamente las labores de limpieza, removiendo piedras, palos y otros obstáculos. Durante esta operación, se descubrieron bombas molotov, petardos y objetos contundentes que habrían sido preparados por los manifestantes para una posible confrontación.
El operativo se desarrolló de forma pacífica, sin el uso de gases lacrimógenos ni otros medios de disuasión, lo cual ayudó a evitar un aumento en las tensiones. Además, un helicóptero sobrevoló la zona serrana para prevenir cualquier intento de emboscada y garantizar la seguridad del personal desplegado.
“Por el momento, no hemos encontrado a los bloqueadores en la vía, pero seguimos revisando las viviendas cercanas para asegurarnos de que no se encuentren ocultos en la zona”, explicó un oficial a cargo del operativo. Las autoridades indicaron que esta intervención busca restaurar la libre circulación en la región y llevar tranquilidad a la población afectada.
El comandante de la Policía en Santa Cruz, Rolando Rojas, lideró el operativo y reafirmó el compromiso de la institución con la seguridad y el libre tránsito. “Estamos aquí para garantizar que esta ruta esté abierta y que las actividades se normalicen”, afirmó Rojas en declaraciones a los medios.
Finalmente, hacia las 9:30 a.m., camiones y vehículos varados pudieron retomar su camino, aliviando la situación para transportistas y viajeros que llevaban días atrapados en la zona.
La recuperación pacífica de esta vía es significativa, pues evita una escalada en las tensiones entre los manifestantes y las fuerzas del orden. Sin embargo, las demandas que motivaron el bloqueo, como la disponibilidad de combustible y divisas, continúan sin resolverse, lo que podría derivar en nuevos reclamos en el futuro.