El ministro de Gobierno de Bolivia, Eduardo del Castillo, denunció que el expresidente Evo Morales habría intentado asesinar a un policía antinarcóticos en el municipio de Villa Tunari, Cochabamba. Según la versión oficial, Morales intentó evadir un control policial, atropellando a un efectivo y ordenando posteriormente la destrucción de pruebas.
Durante una conferencia de prensa, Del Castillo detalló que el incidente ocurrió cuando el vehículo en el que viajaba Morales aceleró tras recibir una señal de alto de los agentes. De acuerdo con el ministro, los ocupantes del vehículo abrieron fuego contra los policías y atropellaron a uno de ellos. El efectivo, al intentar retroceder para esquivar el vehículo, sufrió fracturas en la pierna izquierda luego de ser arrollado.
“El vehículo retrocede y trata nuevamente de pasar por encima del efectivo”, precisó Del Castillo, quien informó que el agente fue trasladado a una clínica en Santa Cruz, donde recibió tratamiento por una fractura en tibia y peroné.
Del Castillo cuestionó la negativa de Morales a someter su vehículo a una inspección en el control y señaló que, tras el enfrentamiento, se ordenó la quema de los vehículos policiales para eliminar evidencias. En sus palabras, el ministro expresó: “¿Qué estaba escondiendo el señor Morales en su vehículo y por qué no quiso ser requisado al igual que los otros 15 motorizados anteriores?”.
La acusación también incluyó un llamado al expresidente para que permita un peritaje de su vehículo, mediante el cual se espera encontrar pruebas de los disparos y el posible contenido ilegal que se estaría trasladando.
Finalmente, Del Castillo anunció que se sumará una denuncia por tentativa de asesinato debido a los disparos y el atropello del efectivo policial. El ministro enfatizó que Morales debe asumir su responsabilidad y enfrentar las acusaciones en su contra, advirtiendo sobre el intento del expresidente de manipular la opinión pública a través de un “teatro” en redes sociales que, según Del Castillo, solo intenta encubrir la verdad del incidente.
Este caso podría reabrir el debate sobre la relación de Morales con el tráfico de drogas en la región del Chapare y sus implicaciones en el ámbito político y judicial, lo que mantendrá en vilo a la opinión pública boliviana en los próximos días.