Ante los continuos bloqueos en las rutas que conectan Cochabamba con el resto del país, la Federación de Entidades Empresariales Privadas de Cochabamba (FEPC) ha declarado emergencia y convocado un cabildo para este viernes. La movilización busca exigir el levantamiento inmediato de los bloqueos que han paralizado la región durante los últimos 10 días, afectando gravemente la economía y el suministro de productos esenciales.
El presidente de la FEPC, Juan Pablo Demeure, fue el encargado de leer el comunicado oficial, en el cual condenó la inacción de las autoridades para garantizar la libre circulación. “Cochabamba ha sido tomada como rehén de los bloqueos. En lo que va de 2024, hemos acumulado 61 días de interrupciones, lo que ha generado pérdidas económicas de 4.286 millones de bolivianos”, subrayó Demeure. Además, señaló que el impacto económico directo de los últimos 10 días de bloqueo asciende a 832,6 millones de bolivianos.
El empresariado cochabambino manifestó su rechazo tanto hacia las autoridades como a los grupos que protagonizan los bloqueos, que están profundizando la crisis económica de la región. “Rechazamos enérgicamente las posturas intransigentes de ambas partes, que han prolongado este conflicto, agravando la crisis y poniendo en riesgo el futuro del país”, añadió el dirigente.
Impacto económico y social
La prolongación de los bloqueos no solo ha ocasionado un impacto económico considerable, sino que también ha derivado en el desabastecimiento de productos básicos y la escasez de combustibles en varias zonas de Cochabamba. “El sector privado ha sido secuestrado y aislado del resto del país”, advirtió Demeure, quien también alertó sobre el riesgo que estos conflictos políticos representan para los empleos y la estabilidad empresarial.
Los bloqueos han forzado el cierre temporal de numerosas empresas, especialmente en el sector gastronómico, donde muchos negocios han tenido que reducir o suspender sus operaciones por falta de insumos. “Si no se resuelve este conflicto, terminaremos el año en una situación muy crítica”, lamentó el presidente de la FEPC.
Cabildo en defensa de la libre circulación
Ante esta crisis, empresarios, junto con organizaciones y gremios, han convocado a un cabildo para el viernes 25 de octubre, con el fin de manifestar su rechazo a los bloqueos y exigir el respeto a la Constitución, que garantiza los derechos a la libre circulación y al trabajo. Amílcar Rocha, presidente de la Cámara de Industria, Comercio y Servicios de Cochabamba (ICAM), destacó la importancia de la unidad en esta causa. “El viernes nos reuniremos en la Plaza de las Banderas para marchar pacíficamente hacia la plaza principal. Exigimos la libertad de trabajar y circular sin impedimentos”, declaró Rocha.
Rocha añadió que el cabildo será una oportunidad para que Cochabamba y el país envíen un mensaje contundente: “Estamos hartos de los bloqueos. Hemos agotado todas las vías posibles de diálogo y defensa de nuestros derechos, pero la falta de voluntad política ha exacerbado el conflicto”.
Apoyo empresarial a nivel nacional
El cabildo contará con el respaldo de gremios empresariales de todo el país. Jean Pierre Antelo, presidente de la Cámara de Industria, Comercio, Servicios y Turismo de Santa Cruz (Cainco), expresó su solidaridad con los empresarios de Cochabamba. “No podemos permitir que se sigan vulnerando los derechos de los ciudadanos y las empresas. Esta situación está destruyendo el aparato productivo, afectando a miles de familias que dependen de su trabajo para sobrevivir”, afirmó Antelo.
Por su parte, Pablo Camacho, presidente de la Cámara Nacional de Industrias, alertó sobre las pérdidas económicas que los bloqueos están generando a nivel nacional. “Más de 600 toneladas de productos están varadas en las carreteras, a punto de perderse. Las pérdidas acumuladas en Cochabamba ya superan los 180 millones de dólares”, precisó Camacho.
Llamado a la paz y a una solución
Apolinar Rivera, presidente del Comité Cívico de Cochabamba, anunció que, además del cabildo, se realizarán reuniones con diversas instituciones para evaluar la situación y planificar medidas adicionales si el conflicto persiste. “Este es un momento crucial para que las autoridades y actores involucrados tomen decisiones responsables. No podemos permitir que la confrontación siga destruyendo nuestra región”, concluyó Rivera.
Los organizadores han enfatizado que la movilización será pacífica, en defensa de los derechos fundamentales de la población y del sector productivo, gravemente afectado por los bloqueos.