Este lunes, los comerciantes de carne de pollo y cerdo protagonizan un paro de 24 horas en protesta por el incremento de precios en la canasta familiar, que ha afectado gravemente sus ventas y ganancias. La medida, impulsada por la subida en los costos de estos productos, tiene como objetivo exigir la intervención del Gobierno.
“El pollo está carísimo, hoy ha subido un boliviano más”, comentó una vendedora, destacando que las ventas han disminuido debido a los precios elevados. En mercados de Santa Cruz, el kilo de piernas de pollo se ofrece hasta en Bs 31, mientras que las ganancias se han reducido al mínimo. “Estamos ganando un bolivianito, pero con el pasaje, nada”, añadió otra comerciante.
El malestar entre los gremios también se extiende a la carne de cerdo, que ha experimentado un alza similar. Ante esta situación, decidieron realizar el paro para visibilizar la crisis que atraviesa su sector y presionar a las autoridades para que tomen acciones que estabilicen los precios.
Edgar Álvarez, dirigente gremial de Santa Cruz, explicó que los bloqueos en las rutas han encarecido aún más los costos, ya que los productores se ven obligados a buscar caminos alternativos para entregar la mercadería. “Estos bloqueos están perjudicando a toda la población, en especial al sector gremial”, señaló Álvarez, subrayando que el incremento de precios afecta directamente a la economía de las familias.
Este paro refleja la preocupación generalizada en el sector comercial y plantea la urgencia de soluciones efectivas para mitigar el impacto económico sobre los consumidores.