Una joven de 24 años acudió a una consulta médica en busca de tratamiento para una lesión, pero lo que debía ser una revisión rutinaria se convirtió en una pesadilla. El médico, de 61 años, fue detenido y acusado de violación luego de que la joven denunciara haber sido agredida sexualmente en el consultorio. Un juez ya ha dictaminado su detención preventiva por cuatro meses, tiempo en el cual se llevarán a cabo las investigaciones.
El incidente ocurrió el pasado 5 de octubre en la ciudad de El Alto, cuando la víctima acudió a la consulta de Eduardo D. R., especialista en traumatología. Según el informe preliminar de la Policía, la agresión ocurrió dentro del consultorio, mientras el médico realizaba la revisión. El reporte oficial detalla que el acusado aprovechó el momento de la consulta para realizar “toques impúdicos penetrantes en las partes íntimas de la señorita”. Este acto criminal fue descubierto cuando efectivos de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (Felcc), que realizaban patrullajes cerca del centro de salud, intervinieron y aprehendieron al médico.
Tras ser interceptado, el galeno presentó signos de descompensación, lo que llevó a su traslado al Hospital Obrero bajo custodia policial. Según el informe policial, Eduardo D. R. sufrió una crisis de ansiedad y un cuadro de hipertensión, lo que no impidió que fuera sometido a la audiencia de medidas cautelares, donde se dictaminó su reclusión en la cárcel de San Pedro por el presunto delito de violación.
Este caso ha conmocionado a la comunidad, ya que pone de relieve la vulnerabilidad de las personas que confían en los profesionales de la salud. Las autoridades continúan investigando para esclarecer los hechos, mientras la víctima recibe el apoyo necesario tras haber vivido una experiencia profundamente traumática.
El comandante departamental de la Policía de La Paz, Édgar Cortez, explicó que el seguimiento de las investigaciones es prioritario para garantizar justicia a la joven. Las implicaciones de este caso son graves, ya que no solo implica un delito de agresión sexual, sino también una violación a la confianza depositada en el profesionalismo médico.
La detención preventiva del médico, durante un período de cuatro meses, busca evitar cualquier intento de fuga o interferencia en el proceso de investigación, un paso fundamental para que la justicia avance en la resolución de este caso que ha causado indignación en la sociedad.