La Agencia Nacional de Hidrocarburos (ANH) llevó a cabo un allanamiento en el municipio de Quillacollo, Cochabamba, donde descubrieron una vivienda que operaba como centro de acopio clandestino de combustible. En el lugar, se incautaron más de 2.400 litros de diésel y 500 litros de gasolina, que presuntamente serían vendidos de manera ilegal.
El operativo fue realizado tras recibir una denuncia, lo que permitió a la ANH, con el apoyo de la Policía y las Fuerzas Armadas, intervenir la vivienda ubicada en la zona de Marquina. Según la directora de la ANH, Wendy Villarroel, dentro del inmueble se encontraron varios turriles llenos de combustible, y un tractocamión que estaba siendo utilizado para almacenar los líquidos.
“Hemos podido interceptar un domicilio donde se acopiaba tanto diésel como gasolina, incluso este tracto-camión estaba siendo usado para poder acopiar el combustible. Se ha identificado más de 2.400 litros en diésel y más de 500 litros en gasolina”, explicó Villarroel, subrayando la magnitud del hallazgo.
Además del combustible, varias personas fueron aprehendidas durante el operativo y puestas a disposición de las autoridades correspondientes, incluyendo la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (Felcc) y el Ministerio Público. La comercialización y almacenamiento ilegal de combustibles está sancionada por el Código Penal en su artículo 226, con penas que van de tres a seis años de cárcel.
En paralelo, la ANH también informó sobre la detención de conductores que realizaban el carguío ilegal de combustible en otros puntos de Cochabamba. En estos operativos, 12 vehículos fueron incautados y remitidos a la Felcc debido a que realizaban repetidas operaciones sospechosas en estaciones de servicio.
Villarroel enfatizó que los operativos de control serán constantes en todo el país, con el fin de frenar la comercialización ilegal de diésel y gasolina, una práctica que no solo afecta al mercado formal, sino que también representa un riesgo para la seguridad pública.