El pasado viernes, una comitiva liderada por el alcalde de San Ignacio de Velasco, Ruddy Dorado, y la diputada María René Álvarez fue emboscada por colonos en el área protegida de Bajo Paraguá. La delegación, que incluía a policías, cívicos, caciques, concejales, una jueza y representantes de la Autoridad de Fiscalización y Control Social de Bosques y Tierra (ABT), realizaba una inspección ante denuncias de avasallamiento y desmontes ilegales en la zona, considerada reserva forestal. Ahora las autoridades piden la militarización de la zona.
El operativo avanzaba con normalidad hasta que la Policía procedió a la aprehensión de cuatro dirigentes locales, lo que desató la reacción violenta de los avasalladores. Los colonos bloquearon caminos y amenazaron a la comitiva. “A partir de esas aprehensiones comenzaron a surgir las amenazas y los bloqueos”, relató la diputada Álvarez, quien aseguró que el grupo logró salir por una ruta alternativa, evitando mayores enfrentamientos.
Avasallamientos y desmontes
La inspección confirmó la ocupación ilegal de tierras en áreas protegidas y la devastación ambiental provocada por desmontes y quemas. “No se puede cuantificar el desmonte, todo estaba en cenizas. Nos queman, nos avasallan y se creen dueños del territorio”, denunció Álvarez. La diputada describió cómo los colonos, aprovechando los incendios forestales, queman el terreno para facilitar asentamientos ilegales. “El área donde están asentadas sus casas está verde, pero todo alrededor está quemado”, explicó.
Las denuncias de comunarios sobre la quema intencionada de tierras en Bajo Paraguá coinciden con las observaciones de la comitiva. Los colonos, al parecer, utilizan el fuego para expandir sus asentamientos en tierras protegidas.
Destrucción de propiedad pública y bloqueos
En medio de los enfrentamientos, se reportó la destrucción de una camioneta de la ABT por parte de los avasalladores. “Son criminales, no vamos a permitir que se asienten en nuestro territorio”, sentenció Álvarez, quien pidió la intervención urgente de la justicia para frenar estos actos delictivos y garantizar la protección del área.
El subgobernador de la provincia Velasco, Vicente Vaca El-Hage, confirmó la existencia de maquinaria utilizada para el desmonte, junto con viviendas precarias y rastros de quema en la zona. “No fuimos a enfrentarnos, fuimos a decomisar esa máquina y notificar a las personas que lo que están haciendo es ilegal”, explicó.
Exigencias de acción inmediata
Ante la gravedad de los hechos, la diputada Álvarez exigió que se dicten medidas precautorias, como la militarización, para frenar toda actividad en la reserva y proceder al desalojo inmediato de los colonos. “Es urgente militarizar la zona e ingresar con efectivos policiales para desalojar a los avasalladores y destruir las construcciones ilegales”, afirmó.
La situación es crítica, ya que los bloqueos establecidos por los avasalladores también impiden el paso de bomberos, en un momento en que los incendios forestales amenazan seriamente a la región. “No nos vamos a cansar hasta liberar el Bajo Paraguá”, concluyó la diputada, dejando en claro la determinación de las autoridades de recuperar el control sobre esta área protegida.