La mesa técnica nacional sobre el censo, realizada este lunes en la sede de Gobierno, no encontró observaciones a la coherencia y consistencia del conteo poblacional, según afirmó Humberto Arandia, director del Instituto Nacional de Estadística (INE). Sin embargo, el encuentro estuvo marcado por la ausencia de los representantes de La Paz, El Alto y Santa Cruz, las regiones que concentran la mayor cantidad de habitantes en el país y que han sido las más críticas con los resultados del censo.
Arandia, en conferencia de prensa tras más de cuatro horas de trabajo, expresó satisfacción por el desarrollo de la reunión, destacando que se respondieron todas las dudas planteadas por los asistentes. “No se han encontrado observaciones por parte de los técnicos presentes en torno a la coherencia y consistencia del conteo poblacional”, afirmó. Además, resaltó la importancia del diálogo basado en datos, al señalar: “Respuestas técnicas a preguntas técnicas”.
A pesar de la ausencia de las tres regiones clave, Arandia subrayó la relevancia de su participación. “Era importante que acudan porque las cuestionantes deben hacerse en la mesa”, declaró. Más temprano, había insinuado que la falta de asistencia podría responder a motivaciones políticas, lo que genera interrogantes sobre el trasfondo de las críticas al censo.
Por su parte, Alfonso Lema, director de la Asociación de Municipalidades de Bolivia (AMB), informó que el INE expuso y justificó la metodología empleada, aunque no se fijó una postura definitiva a favor o en contra. Lema también anunció que, a solicitud de la Federación de Asociaciones Municipales (FAM – Bolivia), se realizarán talleres departamentales para continuar analizando el proceso. El cronograma de estos talleres será fijado el viernes, y se organizarán grupos de municipios por departamentos, además de incluir a los 10 gobiernos autónomos municipales, entre ellos El Alto.
Si bien funcionarios de El Alto asistieron brevemente a la reunión, su participación se limitó a solicitar que el director del INE acuda a la Asamblea de la Alteñidad, tras lo cual se retiraron. De Santa Cruz no acudió ningún representante, y de La Paz, aunque se presentaron 16 personas, no eran necesariamente funcionarios de la alcaldía, que es la que ha emitido las principales observaciones.
Estas tres regiones han cuestionado los datos del conteo poblacional desde que se publicaron los resultados el pasado 29 de agosto, argumentando que las cifras no reflejan la realidad de sus territorios. Tanto La Paz como Santa Cruz y El Alto han exigido explicaciones y una revisión detallada del censo, llegando a pedir una auditoría de los resultados.
El rector de la Universidad Autónoma Gabriel René Moreno (UAGRM), Vicente Cuéllar, uno de los principales críticos, calificó la reunión técnica como un “mitin político”, señalando la presencia de miembros del Pacto de Unidad como una influencia en el debate.
A su vez, el alcalde de La Paz, Iván Arias, ha reiterado que el censo fue manejado con fines políticos y ha insistido en la necesidad de una auditoría independiente.
Con las tensiones aún latentes y las demandas de revisión sobre la mesa, el debate sobre la transparencia y veracidad del censo continúa siendo un tema de fuerte controversia en Bolivia.