El director del Instituto Nacional de Estadística (INE), Humberto Arandia, mantiene su disposición para someter los resultados del Censo de Población y Vivienda 2024 a una auditoría internacional, en respuesta al creciente rechazo de varios sectores del país. Según explicó, el proceso seguiría parámetros técnicos establecidos por organismos internacionales.
“Estamos abiertos a realizar el relevamiento técnico y la revisión de los resultados. Vamos a establecer un procedimiento basado en mecanismos internacionales para hacer un estudio demográfico, técnico y estadístico, tal como lo exige la estadística oficial”, declaró Arandia durante una conferencia en Chuquisaca, donde presentó un informe regional.
No obstante, cuando se le preguntó si la aplicación del Censo estaría condicionada a los resultados de dicha auditoría, Arandia se mantuvo reservado, argumentando que esa es una cuestión política y que no compete al INE. “Veo una pregunta más orientada a lo político que a lo técnico, y esto no es competencia del INE”, subrayó sin ofrecer mayores detalles.
El rechazo a los resultados del Censo se ha intensificado, particularmente en el departamento de Santa Cruz, donde se ha convocado a un paro cívico para expresar el descontento. Al ser consultado sobre esta medida de presión, Arandia prefirió no emitir una opinión, reiterando que no es su responsabilidad opinar sobre asuntos no técnicos.
En Chuquisaca, las reacciones al informe del INE también fueron de insatisfacción. Hilarión Zelaya, dirigente de la Central Obrera Departamental (COD), calificó el reporte presentado por Arandia como “pobre” y lamentó la falta de información comparativa con los datos del Censo de 2012. “Esperábamos resultados sobre servicios básicos, vivienda y una comparación con el pasado, pero el informe fue decepcionante”, afirmó Zelaya.
Por su parte, el Comité Impulsor para el Desarrollo de las Provincias de Chuquisaca (Cidepro) y otras organizaciones cívicas de la región expresaron su desconfianza hacia los datos presentados, señalando que no reflejan la realidad demográfica. “Varios municipios han crecido, pero según los resultados del Censo, su población ha disminuido. Esto ha generado una gran desconfianza”, declaró Cliver Pérez, representante de Cidepro.
El malestar en diversas regiones del país evidencia que el proceso censal enfrenta serios cuestionamientos, tanto desde el ámbito técnico como político, lo que ha derivado en la solicitud de una auditoría internacional para validar los resultados y recuperar la confianza en este importante instrumento estadístico.