La Empresa Nacional de Electricidad (ENDE) Corporación, a través de su distribuidora Elfec, ha dado inicio a un proyecto trascendental para la infraestructura eléctrica de Cochabamba: la primera línea subterránea de alta tensión a 115 kilovoltios (kV) en el departamento. Esta innovadora iniciativa busca modernizar y reforzar el sistema de transporte eléctrico en la región.
El gerente general de Elfec, Héctor Maldonado, destacó la importancia del proyecto durante una entrevista: “Este es un avance crucial para Cochabamba. La línea subterránea no solo representa un cambio tecnológico significativo, sino que también mejora la confiabilidad y estabilidad del suministro eléctrico en la región. Estamos comprometidos con ofrecer una infraestructura moderna que responda a las crecientes demandas de nuestros usuarios”.
La línea subterránea conectará la Subestación Alalay, ubicada en el norte y este del Circuito Bolivia, con la Subestación Rafael Urquidi. Para su construcción, se ha movilizado un equipo técnico especializado y maquinaria de última generación. Esta infraestructura no solo es pionera en Cochabamba, sino que también está alineada con las prácticas utilizadas en las grandes ciudades del mundo en cuanto a distribución y subtransmisión de electricidad.
Maldonado agregó que la puesta en funcionamiento de la línea subterránea aumentará significativamente la confiabilidad y disponibilidad del suministro eléctrico para las familias cochabambinas. “La reducción de fallas en el sistema eléctrico es fundamental para asegurar el crecimiento económico e industrial de la región. Con esta nueva línea, podremos ofrecer una energía más segura a las nuevas industrias y comercios que dependen de un suministro constante para su operación”, señaló.
Este avance, complementó, no solo coloca a Cochabamba a la vanguardia en términos de tecnología eléctrica en Bolivia, sino que también marca un hito en la historia de la infraestructura eléctrica del departamento.