La Agencia Nacional de Hidrocarburos (ANH) ha anunciado una serie de medidas estratégicas para asegurar el abastecimiento regular de carburantes en el país, en respuesta a la creciente sobredemanda que ha generado largas filas en las estaciones de servicio, especialmente para el diésel. Desde el 13 de agosto, el suministro ha mostrado una tendencia a la normalización, aunque persisten desafíos logísticos que están siendo abordados con nuevas acciones.
Germán Giménez, Director Ejecutivo de la ANH, explicó que la demanda inusual ha provocado que algunas estaciones se queden sin combustible durante la noche, especialmente en las ciudades de La Paz, El Alto, Cochabamba, Santa Cruz, Oruro y Potosí. Para mitigar esta situación, se han habilitado estaciones adicionales que recibirán un volumen extra de combustible, permitiendo que los vehículos en tránsito, en particular los de transporte pesado, puedan recargar durante la noche sin contratiempos.
Además de asegurar el abastecimiento nocturno, la ANH ha intensificado los controles en las estaciones de servicio y en las rutas principales. Con el despliegue de más de 55 efectivos militares y 22 funcionarios de la ANH, se han establecido 11 puntos de control fijos y móviles en todo el país, concentrados en los departamentos de Santa Cruz, La Paz y Cochabamba. Estas acciones buscan evitar prácticas especulativas y garantizar que el carburante llegue a quienes realmente lo necesitan.
Una innovación importante es la implementación de un sistema de monitoreo en tiempo real, que permite identificar vehículos que realizan carguíos repetidos en diferentes estaciones. Este sistema alerta al personal de la estación y a la central de monitoreo, lo que desencadena investigaciones inmediatas para evitar acaparamientos y ventas ilegales de carburante.
Giménez subrayó que, aunque las medidas están dando resultados, se requiere de la cooperación de la población para evitar el pánico y el acaparamiento innecesario de combustible. La ANH continuará con su monitoreo exhaustivo y la colaboración interinstitucional para asegurar que el suministro de carburantes se mantenga estable y accesible en todo el territorio nacional.
Finalmente, la ANH ha reforzado su sala de control y monitoreo, desde donde se supervisan las cámaras de las estaciones de servicio, la trazabilidad de las cisternas, y los carguíos en planta, garantizando una vigilancia permanente que permita responder de manera ágil a cualquier irregularidad. Con estas cinco medidas, la ANH confía en que la situación se normalizará y las filas disminuirán significativamente en los próximos días.