En un cambio significativo para el sector energético de Bolivia, el país pasará de ser un exportador de gas a un mero corredor para el gas proveniente del yacimiento Vaca Muerta en Argentina, administrado por la petrolera Tecpetrol. Este gas será transportado hacia Brasil utilizando la infraestructura de gasoductos existente en Bolivia.
Según un reporte del diario argentino El Cronista, Tecpetrol, empresa del grupo Techint, ha obtenido un permiso clave de la Secretaría de Energía de Argentina para exportar gas desde su yacimiento Fortín de Piedra, situado en la formación neuquina, vía Bolivia. La autorización fue firmada por Luis De Ridder, subsecretario de Combustibles Líquidos del Ministerio de Economía de Argentina, permitiendo la exportación interrumpible de hasta 1,5 millones de metros cúbicos de gas natural por día hasta el 30 de abril de 2026.
El acuerdo precontractual se ha establecido con la compañía brasileña MGAS Comercializadora de Gas Natural, estipulando que el punto de exportación será el paso fronterizo argentino-boliviano. Esto confirma que el gas argentino se transportará a Brasil utilizando la red de gasoductos bolivianos, una infraestructura que ha quedado ociosa debido al declive en la producción de gas en Bolivia en los últimos años.
Fortín de Piedra es una de las áreas de mayor producción de gas natural en Argentina, responsable de un tercio del shale gas de la formación Vaca Muerta. Desarrollada desde 2017 con una inversión de 3.500 millones de dólares, esta área producirá el 100% del gas destinado a la exportación a Brasil.
Antes de que el gas pueda fluir a través de Bolivia, es necesario completar la reversión del Gasoducto del Norte, lo que permitirá transportar el gas neuquino a la región norte de Argentina. Este paso se espera para el último trimestre del año, y será seguido por negociaciones entre Argentina y Bolivia para establecer un acuerdo marco que regule el uso de la infraestructura boliviana.
Se anticipa una discusión con los compradores brasileños para acordar un canon por el uso de los gasoductos bolivianos, un costo que se sumará al precio del gas ya acordado entre Tecpetrol y MGAS.
En paralelo, la industria petrolera está evaluando estrategias adicionales para llevar el gas neuquino a la demanda industrial del sur de Brasil, incluyendo la construcción de un nuevo gasoducto de 1.000 kilómetros que atraviese Paraguay, la extensión del ducto existente hasta la brasileña Uruguaiana, o la exportación de gas natural licuado (GNL) desde futuras instalaciones.
Este cambio refleja un acuerdo entre Bolivia y Brasil para promover inversiones en exploración, explotación y transporte de gas, reconociendo la importancia de la integración energética regional y la infraestructura estratégica que une a los tres países. Este acuerdo también incluye diversas formas de cooperación bilateral en el ámbito energético, fortaleciendo la interconexión eléctrica y la integración gasífera en la región.