En un intento por desactivar el anunciado paro indefinido del sector del transporte pesado, el presidente Luis Arce dio inicio este domingo a la reunión con representantes de la Cámara Boliviana de Transporte en la Casa Grande del Pueblo. La cita, que inició a las 12:38 del mediodía, busca encontrar soluciones a las demandas del sector y evitar mayores conflictos que puedan afectar la economía del país.
Al inicio de la reunión, el presidente Arce solicitó al ministro de Obras Públicas, Édgar Montaño, que presentara un informe detallado sobre los avances logrados en la reunión del sábado. Durante dicho encuentro, altas autoridades del Ejecutivo y dirigentes del transporte pesado firmaron un “acta de reunión” y acordaron la reunión de este domingo con el mandatario.
Los dirigentes del transporte pesado, que han mantenido la convocatoria al bloqueo, se mostraron optimistas antes de ingresar a la reunión. “Vamos a salir de la reunión y seguro habrá noticias buenas, noticias nuevas para Bolivia. Nosotros somos antibloqueos, antipolíticos, nosotros queremos apoyar a la economía del país”, declaró Héctor Mercado, dirigente de la Cámara Boliviana del Transporte.
Añadió que durante la reunión presentarán el pliego petitorio del ampliado nacional del transporte, con la esperanza de que el presidente Arce pueda dar soluciones a sus demandas. Luis Añez, otro dirigente del sector, expresó expectativas similares: “Esperamos que el presidente nos dé las soluciones a lo que no se logró resolver”.
La reunión se produce tras la insistencia de los transportistas, quienes previamente habían manifestado que no consideraban al ministro Montaño como una instancia válida para resolver sus demandas debido al incumplimiento de acuerdos anteriores. Sin embargo, el sábado se realizó una reunión con Montaño, al concluir la cual los transportistas señalaron que no se había resuelto ninguna de sus demandas y depositaron sus esperanzas en la reunión con el presidente Arce.
El resultado de esta reunión es crucial para el sector transporte y la estabilidad económica del país, ya que un paro indefinido podría tener consecuencias significativas para la economía boliviana. Los transportistas, que se han declarado “antibloqueos” y “antipolíticos”, esperan que el diálogo con el presidente marque un hito positivo en la resolución de sus problemas.
Se espera que, al concluir el encuentro, se realicen declaraciones oficiales que permitan conocer las decisiones y acuerdos alcanzados, así como los pasos a seguir para evitar el paro anunciado y mantener la normalidad en el transporte nacional.