El Juzgado de Violencia Familiar No. 1 de Coña Coña – Cochabamba, determinó que deben cumplir detención domiciliaria, arraigo, entre otras medidas, dos sacerdotes investigados por el delito de Encubrimiento, Ramón A.B. y Marcos R.D.A., de 83 y 81 años edad, respectivamente, exprovinciales de la Compañía de Jesús.
El dictamen se dio en audiencia de consideración de imputación y aplicación de medidas cautelares, dentro del caso denominado “Padre Pica”, informó la Directora de la Fiscalía Especializada en Delitos en Razón de Género y Juvenil, Daniela Cáceres.
El caso “Padre Pica” se investiga por los delitos de Violación de Infante, Niña, Niño o Adolescente y Abuso Sexual, que se habría cometido en contra de menores de edad.
“El Ministerio Público fundamentó el presupuesto material de forma detallada y precisa, respaldando los hechos con los elementos indiciarios recolectados, historia, catálogos, informes, certificaciones, inspección, actas haciendo énfasis en las declaraciones de víctima e informes psicológicos emitidos por la Unidad de Protección a Víctimas y Testigos, precisando con identificación de fechas y momentos precisos cuando los imputados en su condición de Provinciales Superiores tuvieron conocimiento de los hechos de agresión sexual cometidos, no solo por Pedrajas, sino también por otros jesuitas, hechos registrados entre los años 1970 y 1990”, explicó Cáceres.
Ante la imputación presentada por el Ministerio Público la autoridad jurisdiccional determinó que los dos investigados dentro del caso cumplan medidas cautelares personales, entre ellas, prohibición de comunicarse con personas determinadas, prohibición de salir del país o del ámbito territorial que se determine, sin autorización judicial previa, a cuyo efecto se ordenará su arraigo a las autoridades competentes y detención domiciliaria en el lugar en el que habitan.
“Estas dos personas tenían la obligación y el deber de cuidar que las diferentes obras de la Comunidad Jesuita entre ellos del Colegio Juan XXIII y el Noviciado se cumplan en un ambiente seguro y de protección absoluta de todos los internos, entre otros indicios que continúan siendo investigados”, dijo.
Respecto al Comunicado emitido en las últimas horas por la Compañía de Jesús, relacionados a que ellos continuarán recibiendo denuncias, Cáceres fue enfática al señalar que “el Estado Plurinacional de Bolivia cuenta con normas claras respecto a las instancias receptoras de denuncias y que en el país existen dos: el Ministerio Público y la Policía Boliviana, por lo que solicito no mal informar a la población y reencaminar los canales de denuncia”.