DW.- El sureste del país oceánico está especialmente afectado por el fuego, que se fortalece gracias a las pésimas condiciones meteorológicas que se esperan en las próximas horas.
Los actuales incendios forestales en el sureste de Australia, sumado a las malas condiciones meteorológicas previstas para este miércoles obligaron a las autoridades de ese país a cerrar decenas de escuelas y guarderías, además de la evacuación de 30 mil personas.
Según los pronósticos de la Oficina de Meteorología de Australia, las temperaturas rondarán hoy los 40 grados centígrados acompañadas por fuertes vientos en parte de Victoria, donde la preocupación se centra en el incendio forestal en Bayindeen, a unos 170 kilómetros al noroeste de la ciudad de Melbourne. Allí, las autoridades temen que las llamas, que han calcinado desde el pasado jueves unos 213 kilómetros cuadrados de terreno, se expanda a las localidades cercanas de Beaufort, Elmhurst, Amphitheatre, Lexton, Learmonth y Clunes.
“Nos enfrentamos a importantes problemas de combustión, meteorológicos y topográficos en el terreno del incendio”, advirtió el experto de la Autoridad Rural de Incendios, Jarrod Hayse, en declaraciones a los medios desde la ciudad de Ballarat, recoge la cadena pública australiana ABC.
La temporada de incendios en Australia, uno de los países más vulnerables a la crisis climática, varía según la zona y las condiciones meteorológicas, aunque generalmente se registran en el verano austral, entre los meses de diciembre y marzo.