AFP.- Al menos cuatro policías fueron secuestrados en Ecuador en medio del estado de excepción decretado el lunes por el presidente Daniel Noboa, tras la fuga del jefe de la principal banda narcodelictiva que estaba recluido en una cárcel de Guayaquil, informó la institución policial.
En la costera ciudad de Machala (suroeste) “se produjo el secuestro de tres servidores policiales, quienes se encontraban de turno en el lugar”, mientras que un cuarto uniformado fue plagiado en Quito, reportó la policía a través de su cuenta en la red social X hacia la medianoche.
Agregó que en la capital tres individuos que manejaban un “vehículo polarizado y sin placas” se llevaron al policía.
Los secuestros se dieron luego de que Noboa declaró un estado de excepción por 60 días en todo el país, incluido el sistema penitenciario.
La medida incluye un toque de queda de seis horas que empezó a las 23H00 y se extenderá hasta las 05H00 locales (de 04H00 a 10H00 GMT).
El mandatario dijo que la emergencia permitirá a las Fuerzas Armadas intervenir en el control de las cárceles, donde se reportó la retención de guías penitenciarios, sin que el organismo que administra las prisiones (SNAI) haya precisado el número de retenidos o si fueron liberados.
“Nosotros no vamos a negociar con terroristas ni descansaremos hasta devolverles la paz a los ecuatorianos”, expresó Noboa en un video difundido en su cuenta de Instagram.
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El presidente, que no mencionó la fuga del jefe de la banda de Los Choneros, atribuyó la situación de las cárceles a las acciones de su gobierno para “recuperar el control” de los centros.
Noboa anunció la semana pasada que construirá dos prisiones de máxima seguridad —al estilo de la que edificó el mandatario salvadoreño Nayib Bukele en su guerra contra las pandillas— en las provincias de Pastaza (este) y Santa Elena (suroeste), para aislar a los reclusos más peligrosos.
Explosiones
Policías y militares buscan a Adolfo Macías, alias Fito, quien cumplía una pena de 34 años por delincuencia organizada, narcotráfico y asesinato. Su banda es la más temida del país y se diputa con otras las rutas para el tráfico de drogas.
Por este caso, la Fiscalía informó en la red social X que formuló cargos contra dos funcionarios penitenciarios “que estarían involucrados en la fuga” del criminal de 44 años y que obtuvo un título de abogado estando tras las rejas.
La alerta se encendió el domingo, cuando en un operativo la policía no pudo hallarlo en la cárcel Regional de Guayaquil. El secretario de Comunicación del gobierno, Roberto Izurieta, afirmó en una entrevista con el canal Teleamazonas que “lo más probable” es que hubo “infiltraciones” sobre un inminente operativo de seguridad en la prisión y Macías escapó “horas antes”.
Al plagio de policías la noche del lunes se sumaron explosiones en la costera Esmeraldas (noroeste y cerca de la frontera con Colombia), una de las provincias ecuatorianas controladas por mafias.
De acuerdo con la policía, varias personas arrojaron un artefacto explosivo cerca de una estación policial y dos vehículos fueron quemados en otros lugares, sin dejar víctimas.
En Quito también se reportó el estallido de un auto en el sur de la ciudad y la explosión de un artefacto cerca de un puente peatonal.
Ubicado en medio de Colombia y Perú, los mayores productores mundiales de cocaína, Ecuador se desangra por la guerra por el poder entre organizaciones del narco. El 2023 cerró con más de 7.800 homicidios y 220 toneladas de droga incautadas, un nuevo récord en la nación.
Desde febrero de 2021, los choques entre presos dejaron más de 460 muertos. Además, los homicidios en las calles entre 2018 y 2023 crecieron en casi 800% al pasar de 6 a 46 por cada 100.000 habitantes.