Bolivia expresó este domingo su preocupación por la tensión en la zona del Esequibo e hizo un llamado al diálogo a los gobiernos de Venezuela y Guyana con el fin de agotar todas las instancias de mediación y mecanismos de negociación necesarios y evitar una escalada de desestabilización en la región.
“El Estado Plurinacional de Bolivia ve con preocupación las tensiones recientes por la zona del Esequibo, ya que atenta contra la ‘Declaración de Argyle para el Diálogo y la Paz’ que la República Bolivariana de Venezuela y la República Cooperativa de Guyana adoptaron el 14 de diciembre, bajo los auspicios de la CELAC y la CARICOM, para que el diálogo sea el único modo pacífico de solucionar la controversia respecto de la zona del Esequibo”, se lee en un comunicado emitido por el Ministerio bolivianos de Relaciones Exteriores.
Venezuela y Guyana mantienen una disputa por la Guayana Esequiba, un territorio de unos 160.000 kilómetros cuadrados.
La controversia escaló tras la aprobación por parte de Venezuela, el 3 de diciembre en un referendo de incorporar la zona disputada, bajo control de Georgetown, y la modificación del mapa oficial de Venezuela, al que se incorporó la Guayana Esequiba.
En medio de esta tensión, el Reino Unido envió, hace unos días, el buque HMS Trent, de la Armada Británica, a las costas de Guyana. Venezuela consideró un acto de provocación hostil y una violación a la reciente Declaración de Argyle, firmada el 14 de diciembre con Guyana como una hoja de ruta para abordar la controversia territorial por el Esequibo.
Ante ese escenario, Bolivia hizo “un llamado a ambas partes a no dejarse conducir hacia el camino de la violencia y más bien a continuar con el diálogo diplomático bilateral y agotar todas las instancias de mediación y mecanismos de negociación necesarios”.
La declaración de Argyle estableció el compromiso de Guyana y Venezuela de recurrir a los instrumentos del diálogo y de cooperación para evitar incidentes que podrían tener gravísimas consecuencias bilaterales y regionales, así como delimitar sus acciones en el marco del derecho internacional.
La Cancillería boliviana advirtió que “la demostración militar no ayuda al proceso de diálogo bilateral en curso y entorpece el proceso iniciado por ambos países y podría, además, generar una posible escalada de desestabilización en la región”.
Por ello, instó a Venezuela y Guyana a cumplir la Declaración de Argyle y dar uso al punto seis para convocar a las reuniones que sean necesarias con el objeto de evitar rupturas innecesarias y peligrosas, y actuar en el marco de la Proclama de América Latina y El Caribe como Zona de Paz, aprobada por los Jefes de Estado de la CELAC el 29 de enero de 2014.