El exministro de Hidrocarburos, Víctor Hugo Zamora, y el expresidente de Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB), Herland Soliz, ambos prófugos, fueron condenados el miércoles a ocho años de cárcel por la paralización, durante el gobierno de la expresidenta Jeanine Áñez, de la Planta de Amoniaco y Urea (PAU), que dejó pérdidas millonarias para el Estado.
Ambas personas deben cumplir la sentencia en la cárcel de máxima seguridad de Chonchocoro de La Paz, según la condena dictada en un juzgado de Ivirgarzama, Cochabamba. Fueron acusados, junto a otras cuatro exautoridades, por los delitos de incumplimiento de deberes y conducta antieconómica.
De acuerdo a las investigaciones, fueron los responsables de la abrupta paralización de la planta sin ningún criterio técnico. Una de las turbinas, calderos y otros equipos fueron dañados y su reposición demandó una inversión superior a los $us 400 millones, sin tomar en cuenta pérdidas económicas de esta plantea que a septiembre batió récord de producción y generó $us 22,8 millones.
Jorge Blancourt Calvo, Oscar Boutier Hurtado y Carlos Vilar Gutiérrez también fueron sentenciados a ocho años de cárcel en El Abra, Cochabamba, mientras Ivert Oliva Soria a cinco años y cuatro meses, quien cumple detención domiciliaria.
Hasta antes de noviembre de 2019, el principal comprador de urea era Brasil con 277.539 toneladas; seguido por Argentina con 103.725; Paraguay con 27.952; Uruguay con 13.008, y Perú con 4.068. Antes de la paralización de producción, tenía contratos pendientes con el primer país.
Tras la paralización de la planta, se retiró al 73% de personal especializado y entrenado. Se encontraba parcialmente en estado de preservación con nitrógeno. Los sistemas de servicios auxiliares estaban en funcionamiento generando gasto operacional por más de un año. Tampoco se realizó el mantenimiento respectivo a todos los equipos críticos y sistemas de seguridad.
En septiembre de 2021 retomó operaciones la Planta de Amoniaco y Urea en Bulo Bulo, Cochabamba, complejo que tuvo 22 meses de paralización.