EFE.- El presidente chino, Xi Jinping, mantuvo hoy una reunión en la ciudad china de Hangzhou (este) con su homólogo sirio, Bachar al Asad, en la que ambos mandatarios anunciaron el establecimiento de una “asociación estratégica” que “marcará un hito” en sus relaciones.
Asimismo, el líder chino aseguró a su par árabe que su país está “dispuesto a seguir colaborando con Siria” ante “una situación internacional plagada de inestabilidad e incertidumbre”, recogió la cadena estatal CCTV.
Xi explicó a Al Asad que las relaciones entre China y Siria “han resistido la prueba de las tormentas y los cambios internacionales, y la amistad entre ambos países se ha hecho cada vez más fuerte”.
“China está dispuesta a trabajar con Siria para promover la amistad y la cooperación y proteger conjuntamente la justicia internacional”, declaró el presidente chino.
El mandatario subrayó que su país apoya a Siria en la oposición a las interferencias extranjeras, el rechazo al unilateralismo y a la práctica del “bulling”, y la salvaguarda de su independencia, soberanía e integridad territorial.
También mencionó el respaldo de China a Siria en las labores de reconstrucción del país tras doce años en guerra, en la mejora de su capacidad de lucha contra el terrorismo y en la promoción de una solución política a la cuestión siria bajo el principio de “guiado por Siria y reconocido por Siria”.
Además, Xi manifestó que China apoya al país de Al Asad en la mejora de sus relaciones con otras naciones árabes.
Por su parte, el presidente sirio aseguró que para su país el establecimiento de una “asociación estratégica” con China será una oportunidad de fortalecer la “amistosa” cooperación bilateral y aumentar la comunicación y coordinación en asuntos internacionales y regionales, según la agencia oficial Xinhua.
Al Asad aplaudió a China por su alineación con “la justicia y el humanitarismo” en los asuntos internacionales y por jugar un rol “importante y constructivo” en los mismos.
El gobernante agregó que Siria está dispuesta a ser “amigo y socio” de China a largo plazo y recalcó su apoyo y adhesión a las principales iniciativas internacionales del gigante asiático: las Nuevas Rutas de la Seda y las iniciativas de Desarrollo Global, Seguridad Global y Civilización Global, en las que su país “participará activamente”.
Tras su reunión, los mandatarios chino y sirio presidieron la firma de acuerdos de cooperación bilateral en materia económica y tecnológica, así como en el ámbito de las Nuevas Rutas de la Seda.
El líder sirio asistirá este sábado en Hangzhou a la ceremonia de inauguración de la XIX edición de los Juegos Asiáticos tras dar comienzo este jueves su primera visita en casi dos décadas al gigante asiático.
Esta es además la primera vez que Al Asad viaja a China desde el estallido de la guerra civil siria en 2011, aunque antes del conflicto sí había visitado el país asiático, cuyas autoridades, a juicio de los expertos, están interesadas en potenciar su peso en Siria y otros países cercanos de Oriente Medio.
Analistas locales declararon a la prensa china que la visita de Al Asad ilustra un “reconocimiento” a la diplomacia china por parte de los países de Oriente Medio, región en la que China ha aumentado su influencia en los últimos años, por ejemplo ejerciendo de mediadora el pasado marzo para que Irán y Arabia Saudí restablecieran sus relaciones diplomáticas.
Estados Unidos, antagonista cuya presencia Pekín busca a menudo contrarrestar, lidera una coalición internacional de lucha contra el grupo yihadista Estado Islámico (EI) en Siria y está desplegado en varias bases militares del país árabe, contra la voluntad del Gobierno de Al Asad.