La Embajada de Bolivia en Japón, en colaboración con la empresa japonesa SudoWork, inauguró el Mes del Singani con un evento que marca el inicio de un tiempo de experiencias excepcionales y actividades culturales destinadas a estrechar los lazos entre Bolivia y Japón.
El acto inaugural, celebrado en el prestigioso Bar &SPIRITS de Tokio, comenzó con una ofrenda a la Pachamama, simbolizando la profunda conexión entre las herencias ancestrales de Bolivia y Japón, y la fusión de elementos culturales andinos en un elegante entorno de coctelería, da cuenta un reporte del Ministerio de Relaciones Exteriores.
El Mes del Singani representa una oportunidad para los productores de singani bolivianos, ya que les brinda un escaparate único para promocionar y compartir su preciada bebida con el mercado japonés y el mundo entero.
A través de actividades y colaboraciones con expertos en mixología, los productores tendrán la oportunidad de destacar la calidad y la autenticidad del singani boliviano, y abrir nuevas puertas en el mercado internacional.
El evento reunirá una serie de actividades y contará con la participación de destacados expertos en el mundo de la coctelería, incluyendo a los reconocidos bartenders japoneses: Taku Moriwaki, Yuki Murakami, Tetsuta Miyanoue, Hiroyasu Ogura y Hiromitsu Ito.
Además, prestigiosos bares como &SPIRITS y SAKE COLECTIVE & SPIRITS se unirán al evento para crear cócteles especiales y exclusivos, aportando un toque exótico y creativo a la experiencia.
Los visitantes tendrán la oportunidad única de saborear y explorar cócteles elaborados con singani, descubriendo los sabores y aromas que distinguen a esta apreciada bebida boliviana.
El singani, un destilado de uva con una amplia tradición, se produce a partir de la uva Moscatel de Alejandría y cuenta con una Denominación de Origen.
Su producción principal se concentra en el departamento de Tarija, donde los viñedos se encuentran estratégicamente ubicados entre los 1.800 y 2.200 metros sobre el nivel del mar. Este factor distintivo, la altitud de cultivo de la uva, confiere al singani boliviano una característica organoléptica singular en cuanto a su aroma y consistencia.
El Mes del Singani representa una oportunidad para celebrar la cultura y la tradición de Bolivia en el corazón de Japón, fortaleciendo los lazos culturales y culinarios entre ambos países.