La estatal Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) informó este jueves que facturó más de 1.224 millones de dólares por la venta de gas natural a Brasil, Argentina y al mercado interno entre enero y junio de este año.
La comercialización de gas a Brasil permitió facturar poco más de 701 millones de dólares en el primer trimestre dentro de los contratos vigentes con Petrobras y otros clientes como MTGAS, precisó YPFB en un comunicado de prensa.
La demanda del mercado brasileño en los primeros seis meses del año mantuvo un nivel estable “sin mostrar un crecimiento importante” debido a que el consumo de gas para la generación eléctrica se redujo por los niveles altos de los embalses en ese país, según YPFB.
En el mismo periodo, por la venta de gas a Argentina se obtuvo 422 millones de dólares en el marco del contrato que tiene la petrolera boliviana con la también estatal Energía Argentina S.A. (Enarsa).
“El requerimiento de Argentina ha sido cumplido en su totalidad, pese al descenso de las temperaturas con cierto rezago en comparación al año anterior”, señaló el presidente de YPFB, Armin Dorgathen, citado en la nota.
Ese fenómeno se notó sobre todo en el norte argentino, “área de influencia directa para la demanda de nuestro gas”, agregó.
La estatal boliviana aseguró que el país cumplió con la entrega de los volúmenes de gas comprometidos en sus contratos con Brasil y Argentina.
Durante el primer semestre de 2023, el consumo de gas en el mercado interno tuvo un incremento del 10 % respecto al año anterior, lo que permitió a YPFB facturar 101 millones de dólares por las ventas del energético dentro del país.
Según la empresa, el volumen comercializado internamente cubrió la demanda de los sectores de generación térmica “para los sistemas eléctricos, residencial, comercial, industrial, transporte vehicular, consumidores directos, las plantas de separación de líquidos, el complejo petroquímico de amoniaco y urea”, y el gas natural licuado (GNL), entre otros.
Dorgathen destacó que los ingresos logrados por la venta de gas “contribuyen a la renta petrolera en beneficio de gobernaciones, municipios, el sistema universitario público, el Tesoro General del Estado” y la misma YPFB.
Al menos en las dos últimas décadas, el gas fue el producto estrella de exportación de Bolivia y el sustento de su crecimiento económico, con Brasil y Argentina como principales mercados, pero en los últimos años se ha advertido una disminución en la producción y los ingresos.
Al declive del sector hidrocarburífero boliviano se sumó la reciente inauguración en Argentina del primer tramo del Gasoducto Presidente Néstor Kirchner (GPNK), que abastecerá el gas de Vaca Muerta al mercado argentino con miras a dejar de importar el energético, según las autoridades de ese país.
Se anunció la negociación de una adenda al contrato entre Bolivia y Argentina, con la perspectiva de que el país vecino disminuya los volúmenes de compra de gas boliviano a partir de 2024.