El Plan de Reactivación del Upstream (PRU) de Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB), que se viene implementando desde el 2021 y que concluirá en 2024, apunta a desarrollar 36 proyectos exploratorios en los departamentos de Santa Cruz, Tarija, Chuquisaca, Cochabamba, La Paz y Pando, informó una fuente oficial.
El presidente ejecutivo interinos de YPFB, Armin Dorgathen, señaló que este plan busca incrementar la producción de hidrocarburos y la reposición de reservas mediante la optimización de recursos existentes e inversiones en exploración y explotación.
“En julio de 2021, YPFB anunció el lanzamiento del Plan de Reactivación del Upstream con el objetivo de realizar inversiones en la exploración y explotación de hidrocarburos en el país. En 2022, fortalecimos, comenzamos a perforar y realizar estudios. Nuestro PRU también contempla la reactivación de campos maduros, que ya están produciendo”, indicó.
En la industria de los hidrocarburos, el término Upstream abarca todo el proceso que comprende la evaluación geológica, perforación, descubrimiento de reservas de gas o petróleo y extracción de estas a la superficie para su procesamiento y entrega, explicó.
Proyectos
Dorgathen detalló que de los 36 proyectos, siete están en elaboración y gestión de aprobación, cinco proyectos ya están aprobados, 16 están en ejecución, siete están concluidos y existe un proyecto de fuerza mayor.
“Las inversiones que realicemos como YPFB Casa Matriz con nuestras empresas subsidiarias y filiales traen empleo, desarrollo a la zona que se interviene y generan mayor movimiento económico. Todo proyecto petrolero que se realice tiene gran beneficio para la población. Además, todas las actividades exploratorias que hacemos contemplan el cuidado del medioambiente”, agregó.
Un aspecto sobresaliente es que el PRU no solo apunta a la perforación de pozos exploratorios en zonas productoras tradicionales como es el Subandino Sur, sino también mira al Subandino Norte con proyectos en el departamento de La Paz como Mayaya Centro X1-IE, actualmente en perforación, apuntó.
“El objetivo es brindar seguridad energética al país y hay que tener muy claro que una mayor producción de gas implica mayor exportación e industrialización, lo cual genera importantes ingresos para la economía del país. Además, la producción de líquidos nos permite refinar crudo y reducir importaciones de carburantes bajo la línea de la Sustitución de Importaciones”, precisó.