China anunció este martes que decidió expulsar a la cónsul canadiense del Consulado General de Canadá en Shanghái en respuesta a la expulsión de un diplomático chino por parte del país norteamericano.
El Ministerio de Relaciones Exteriores de China declaró a la diplomática canadiense Jennifer Lynn Lalonde “persona non grata” y le dio un plazo de cinco días para salir de China, lo que la funcionaria debe hacer antes del 13 de mayo.
Además, la Cancillería del gigante asiático advirtió que se reserva el derecho de tomar otras medidas.
El portavoz de la cartera china de Exteriores Wang Wenbin indicó hoy en una rueda de prensa que China “tomó esta decisión para proteger sus intereses y derechos legítimos” y que la medida “es completamente necesaria y justificada”.
La decisión de Beijing se produce después de que Canadá expulsara al diplomático chino en Ottawa Zhao Wei por supuestamente interferir en los asuntos internos del país norteamericano.
“China nunca interfiere en los asuntos internos de otros países”, aseveró Wang, que añadió que “la supuesta injerencia china en Canadá carece de sentido” y que es “una manipulación política basada en la ideología”.
El vocero acusó al país norteamericano de “violar las normas básicas de las relaciones internacionales” con la expulsión de Zhao.
Medios de comunicación canadienses publicaron que el servicio de inteligencia de Canadá (CSIS, siglas en inglés) sabía desde 2021 que las autoridades chinas estaban interesadas en conseguir información sobre los familiares del diputado canadiense Michael Chong para imponerles “sanciones potenciales”.
La misma noticia afirmaba que Zhao estuvo implicado en el intento de localización de familiares del diputado que supuestamente viven en Hong Kong.