La estatal Empresa Nacional de Electricidad (ENDE) “tiene luz verde” para exportar en próximo días excedentes de energía eléctrica a Argentina, y proyecta similar negocio con Brasil, Perú y Chile. El envío de energía eléctrica será progresivo y empezará con unos 40 megavatios, según las proyecciones oficiales.
El gerente de ENDE, Manuel Valle, informó de la concreción del proyecto, que tiene previsto el envío de energía eléctrica, a través del sistema interconectado, a la ciudad de Tartagal y a localidades vecinas como Orán, Piquirenda, Tabacal, Pichanal, Senda Hachada y Dragones.
“Hoy (martes) nos dieron luz verde para inyectar energía eléctrica a Argentina, está la línea completa, hemos pasado todas las pruebas necesarias y estimamos que en los próximos días vamos a empezar a inyectar”, afirmó en una entrevista con la estatal Bolivia Tv.
El proyecto de Interconexión Eléctrica Bolivia–Argentina, consiste en una Línea de Transmisión en 132 kV de 120 km de longitud (46,49 km en Bolivia y 73,88 km en Argentina), que une la Subestación Yaguacua en el territorio boliviano, con la Subestación Tartagal en el territorio argentino, permitiendo el transporte de energía eléctrica con una potencia estimada de 120 MW.
ENDE, a través de su empresa subsidiaria ENDE Transmisión Argentina S.A. (Etasa), retomó en 2021 la construcción del tramo en territorio argentino de la línea eléctrica que forma parte del proyecto “Juana Azurduy de Padilla 132 kV Bolivia – Argentina”. Todo el trabajo concluyó en 2022.
Bolivia genera al menos 3.600 megavatios y su demanda máxima fue de 1.600 megavatios. “Tenemos un buen margen para poder disponer”, explicó.
Valle espera ampliar la exportación a mercados como Brasil, una vez se consolide la ampliación de una línea de alta tensión hasta la fronteriza Puerto Suárez, para atender la demanda que vaya a tener el megaproyecto de hierro del Mutún.
Este año se espera concretar este segundo negocio, sin descuidar los mercados de Perú y Chile.