Dos pilotos de la Fuerza Aérea Boliviana (FAB), que realizaban el viernes un vuelo de reconocimiento en un avión K8 FAB-661 en el departamento de Pando, salvaron su vida, después de que la aeronave se precipitara a tierra por causas que son investigadas, informó este sábado el ministro de Defensa, Edmundo Novillo.
“Eran dos aeronaves que estaban haciendo este trabajo de entrenamiento. Por la información que tengo, el motor de una de ellas se incendió repentinamente y empezó a tener problemas. Los pilotos tuvieron que eyectarse para salvar sus vidas. Estábamos muy preocupados por la vida de los pilotos, se tomó contacto y sabemos que están ilesos”, dijo la autoridad citada en un boletín de prensa.
Desde la FAB, mediante un comunicado, se indicó que el siniestro ocurrió a las 16:30, aproximadamente, a unos 100 kilómetros al sudeste de la ciudad de Cobija, capital del departamento de Pando. El evento causó zozobra entre los comunarios que se encontraban cerca del campo donde cayó el avión.
Medios locales reportaron que, en horas de la noche, los dos pilotos que lograron eyectarse de la aeronave llegaron hasta el Hospital Integramedica de Cobija, en un vehículo particular e ingresaron a ese nosocomio caminando sin lesiones visibles.
“Fue un accidente de alto impacto y con mucha fortuna. Los tripulantes, ambos de sexo masculino, están estables y ya fueron evaluados por el equipo médico. Ahora están en proceso de recuperación”, reportó el médico Luis Sequeiros Peña en contacto con el periodista Kike Nava.
Novillo indicó que tras lo ocurrido se instruyó la activación inmediata de la Junta Investigadora de Accidentes Aeronáuticos (JIAA), para que determine las causas del hecho. “Esta entidad tiene sus plazos y de acuerdo a eso seguro nos darán el informe para que podamos tomar las decisiones en función de sus recomendaciones”, apuntó.
Hasta 2021, la FAB contaba con seis aeronaves K8, asignadas al Grupo Aéreo Caza 34, ubicado en Cochabamba. Estos son aviones a propulsión por turbina que se utilizan para el entrenamiento y para labores de observación en la lucha contra el narcotráfico y el contrabando.
Tienen dos plazas de navegación, ambas con un sistema de eyección. Gracias a este mecanismo es que ambos tripulantes pudieron salvar sus vidas. En toda la región solo Venezuela cuenta con naves similares.