DW.- Las bolsas chinas cerraron con pérdidas en su primera jornada tras el final del XX Congreso del Partido Comunista de China (PCCh), a pesar de que varios datos económicos, como el PIB del tercer trimestre, cuya publicación se retrasó hasta este lunes (24.10.2022), superaron los pronósticos de los analistas.
El índice de referencia del parqué de la antigua colonia británica, el Hang Seng, se desplomó nada menos que un 6,36 %, luego de que ya había cerrado en mínimos de los últimos 13 años el pasado viernes. En Shanghái y Shenzhen, también hubo pérdidas pero de menor calado, de un 2,02 % y un 2,05 %, respectivamente.
Según un informe de Goldman Sachs, citado por el diario hongkonés South China Morning Post, la preocupación de los inversores se debería a la “ausencia de reconocidos reformistas económicos orientados al mercado” entre los siete miembros del nuevo Comité Permanente del Politburó, el todopoderoso órgano rector del PCCh.
Consecuencias para Hong Kong y el sector digital
En Hong Kong, gigantes digitales como Alibaba y Tencent —los dos mayores valores por peso de cotización del parqué— experimentaron desplomes superiores al 11 %, mientras que el índice que mide la evolución de las cotizadas de ese sector, el Hang Seng Tech Index, se contrajo un 9,65 % durante la sesión.
El sector digital se vio especialmente afectado por una campaña de regulación que comenzó en noviembre de 2020, cuando el Gobierno frustró a última hora la salida a bolsa de la “fintech” de Alibaba, Ant Group, que iba a ser la mayor de la historia, y que se ha saldado con multas millonarias e investigaciones oficiales, extendiéndose también a otras industrias en las que las autoridades querían reforzar su control, como la educativa.
Contrario a las informaciones surgidas en primavera sobre el posible final de esta campaña, el presidente Xi Jinping prometió durante el Congreso “regular” la acumulación de riqueza y “ajustar” los ingresos “excesivos”, lo que algunos inversores parecen interpretar como un escrutinio todavía mayor al capital privado.
El PIB “reaparece” con datos positivos
La jornada también estuvo marcada por la publicación, tras varios días de retraso injustificado, de datos como el producto interior bruto (PIB) del tercer trimestre, que creció un 3,9 % en comparación con el cuarto anterior, en el que se había contraído un 2,6 % por los confinamientos dictados ante los peores rebrotes de COVID en dos años.
El dato es mejor de lo esperado por los analistas, que pronosticaban un avance intertrimestral del 3,5 %. Entre enero y septiembre, la subida es del 3 %, todavía lejos del objetivo que se marcó Pekín en marzo para el ejercicio, del 5,5 %, uno de los más bajos de las últimas décadas, pero aún así, según indicaron entonces los expertos, muy ambicioso dado el contexto actual.
Junto al PIB se publicaron otros datos oficiales de septiembre como la producción industrial (6,3 % interanual más), las ventas minoristas (2,5 %), la inversión en activos fijos (5,9 % en el acumulado de los tres primeros trimestres) o la tasa oficial de desempleo urbano, que pasó del 5,3 % al 5,5 %.
Datos de comercio, también retrasados
La Administración General de Aduanas también divulgó hoy los datos del comercio denominado en yuanes entre China y el resto del mundo, que creció un 8,3 % interanual en agosto, con las exportaciones aumentando a ritmo mucho más rápido que las importaciones (10,7 % frente a 5,2 %).
Aduanas debía haber publicado estas cifras el día 14 pero faltó a su cita sin explicación alguna, lo que disparó sospechas entre algunos comentaristas que no hicieron sino crecer cuando la Oficina Nacional de Estadística (ONE) también pospuso de forma abrupta y sorpresiva la divulgación del PIB en la víspera del día fijado para hacerlo.
Según fuentes citadas por Bloomberg, el retraso se debió a que quienes debían firmar los documentos físicos para la publicación de los datos se hallaban aislados en la “burbuja” anticovid del XX Congreso del Partido Comunista, que finalizó el sábado.