Agencias.- La justicia rusa ha condenado este jueves a nueve años de cárcel a la baloncestista estadounidense Brittney Griner por posesión y contrabando de drogas. La deportista, de 31 años, admitió su “error” al introducir en territorio ruso aceite de cannabis en cartuchos para vapear, pero también pidió clemencia durante la vista celebrada en el tribunal urbano de Jimki, en la región de Moscú.
Su sentencia podría allanar el camino para un intercambio de prisioneros de alto nivel entre Rusia y Estados Unidos. La semana pasada, el secretario de Estado de EEUU, Anthony Blinken, propuso a su colega ruso, Serguéi Lavrov, el canje de Griner y Paul Whelan, condenado a 16 años por espionaje, por Víctor But, alias el “mercader de la muerte”, que cumple 25 años de cárcel en una prisión estadounidense. Moscú pidió incluir a un segundo preso ruso, el checheno Vadím Krásikov, pero la Casa Blanca lo rechazó, según informó la CNN.
La condena de Griner, dos veces medallista de oro olímpica y estrella de la Asociación Nacional de Baloncesto Femenino (WNBA), ha causado un fuerte revuelo en su país. El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, calificó de “inaceptable” el fallo y dijo que la Casa Blanca trabajará incansablemente en pos de su liberación. “Hoy, la ciudadana estadounidense Brittney Griner recibió una sentencia de prisión que es un recordatorio más de lo que el mundo ya sabía: Rusia está deteniendo de forma injusta a Brittney”, afirmó Biden. “Es inaceptable y pido a Rusia que la libere de inmediato para que pueda estar con su esposa, seres queridos, amigos y compañeros de equipo”.
Aceite de cannabis
Griner fue detenida en el aeropuerto moscovita de Sheremetyevo el 17 de febrero con cartuchos de vapeo que contenían aceite de hachís en su equipaje. Se declaró culpable, pero dijo que no había tenido la intención de llevar una sustancia prohibida a Rusia ni de hacer daño a nadie. En una declaración lacrimógena antes del veredicto, Griner imploró al juez que reconociera sus acciones como un error. “Cometí un error honesto y espero que en su sentencia no acabe con mi vida”, dijo en el tribunal antes de romper a llorar.
Los cartuchos de vapeo arrojaron a la atleta texana a la vorágine geopolítica desatada cuando el presidente Vladimir Putin envió tropas a Ucrania el 24 de febrero. Durante las relaciones más tensas entre Estados Unidos y Rusia desde la crisis de los misiles de Cuba de 1962, Biden está siendo presionado para que intervenga en favor de los estadounidenses retenidos en Rusia.
Futuro prometedor
El ala-pívot del equipo ruso Ekaterinburg tiene una estatura de 2,03 metros y era una de las jugadoras estrella del conjunto estadounidense. Fue elegida número 1 en el draft de la WNBA de 2013 por el Phoenix Mercury, único equipo profesional estadounidense en el que ha militado desde entonces y en el que es una de sus jugadoras destacadas. Con este conquistó el título de la WNBA en 2014 y fue finalista en 2021, cuando las superaron las Chicago Sky. En 8 ocasiones, la última en 2022 de forma testimonial, ha sido incluida para el All-Star de la WNBA.
Fuera de EEUU, jugó en 2014 en el Beijing Great Wall chino, estancia en la sufrió un percance el 3 de noviembre de ese año al ser asaltada y apuñalada poco después de entrenar con su equipo. Desde 2015 milita en el club ruso del UGMK Ekaterinburg, el equipo más potente del baloncesto europeo, que cuenta con tres Euroligas. En este conjunto tiene como entrenador al español Miguel Méndez (también seleccionador nacional) y en él ha coincidido con la española Alba Torrens.