La certificadora internacional CERES (Certification of Environmental Standards Home, por sus siglas en inglés), con base en Alemania, renovó la certificación a 325 mil hectáreas para la producción de castaña orgánica en la Reserva Nacional de Vida Silvestre Amazónico Manuripi de Pando.
Esta es la mayor superficie certificada a nivel nacional desde el año 2012 y podría alcanzar a producir 10.000 toneladas al año, equivalente al 15% de lo que Bolivia exporta al mundo. Son ocho comunidades y 32 previos individuales.
El director de la Reserva Nacional de Vida Silvestre Amazónico Manuripi, Elvis Fernández, citado por radio Frontera, aseguró que esta renovación traer muchos beneficios ya que la producción de castaña orgánica cumple con estándares de calidad internacional con buenas prácticas de manufactura y de higiene dentro las comunidades.
Por su lado, Víctor García, representante de la ONG – WWF, dijo el trabajo conjunto entre el Sernap y la WWF ha permitido alcanzar ese objetivo que busca valorizar la producción silvestre para el desarrollo de mercados diferenciados.
El portal oficial de la WWF informa que luego de las restricciones provocadas por la covid-19, las inspecciones externas son más rigurosas en el cumplimiento de los estándares lo que implica un trabajo y compromiso de la reserva en mantener las condiciones desarrollando actividades pre y post zafra.
Con este instrumento pueden comercializar castaña al mercado orgánico. Ya son 11 años en que la Reserva Nacional de Vida Silvestre Amazónica Manuripi viene cumpliendo los criterios de la norma boliviana, europea y americana.
La certificación es otorgada fue conocida el pasado 12 de agosto durante una conferencia de prensa en la ciudad de Cobija, donde los representantes explicaron este logro fue posible con la concurrencia de financiamientos del Sernap con fondos del Sisco Manuripi y fondos de WWF en el marco del proyecto BMZ.