Javier Onzaga Franco, de nacionalidad colombiana, es un joven chef que se especializó en gastronomía en el instituto IGA en Buenos Aires hace seis años.
Fue allá donde conoció a la mujer con la que después formaría un hogar, se trata de una cochabambina, médica de profesión, y quien en la actualidad se encuentra en la dulce espera de su primogénito.
Al concluir sus estudios en Colombia, Javier decidió que su pasión sería la cocina y por ello salió de su país en busca de mejores opciones. Residió por cuatro años y medio en Argentina, y hace un año y tres meses que vive en Bolivia.
“Trabajé en restaurantes conocidos de Buenos Aires, de comida italiana mas que todo, aprendí bastante conceptos de gastronomía, bastantes técnicas. El amor a la gastronomía nació desde pequeño”, relata a Enfoque News.
Con el inicio de la pandemia, la economía allá se puso un poco complicada, por lo que decidieron cambiar de rumbo y se vinieron a radicar a Cochabamba.
“Yo vine con la idea clara de montar un restaurante en el cual fusionara varios sabores internacionales, como los (sabores) bolivianos, que son tan deliciosos, es un país rico en materia prima, las verduras y especias todavía tienen ese sabor tradicional”, dice Javier.
El restaurante “Las Orquídeas” fue inaugurado en septiembre del año pasado. El nombre del negocio, según explica nuestro entrevistado, es en honor a la flor típica de Colombia y además le trae buenos recuerdos.
La comida que se sirve en el restaurante es un poco diferente a la que habitualmente se acostumbra consumir en Cochabamba; sin embargo, tuvo una buena acogida de parte de la población.
“Nos estamos haciendo conocer todavía, pero lo poco que hemos preparado les ha gustado bastante”, relata entre risas.
Entre los platos que prepara están la arepa, empanadas sin gluten, patacones (típicos de Colombia) que son los que más piden los comensales que acuden al restaurante.
Asimismo, los clientes degustan de un buen plato de ravioles, bandeja paisa que lleva poroto, arroz, chicharrón, chorizo, palta, carne molida y arepa. No puede faltar la ensalada tradicional con verduras frescas.
Otro de los productos más solicitados es el té de frutos rojos, además de los refrescos y jugos naturales que ofrecen a su clientela.
El restaurante está ubicado en la avenida Simón López casi esquina Washington, acera sud a una cuadra del Tribunal Departamental Electoral, la atención es de lunes a sábado de 10.00 a 21.00.
El restaurante es un lugar donde a los comensales se les permite ingresar con sus mascotas, porque muchas personas optan por dejarlos solos en sus viviendas.
Colectivo de productos orgánicos
Javier y su esposa son parte de un colectivo que trabajan con productos orgánicos para luego reciclarlos.
“Los productos orgánicos se desperdician por no tener conocimiento, nuestra misión o visión del restaurante es aprovechar todos los recursos al máximo. Todos los desperdicios, como las hojas de brócoli o de remolacha, los reutilizamos, ese es nuestro aporte en el colectivo”, señala.
Se aprovecha los recursos naturales como materia prima, “tratamos de no tener desperdicios, es nuestra ideología del restaurante”, concluye.