El viceministro de Defensa de los Derechos del Usuario y Consumidor, Jorge Silva informó hoy que se instalarán puntos de reclamo en las oficinas del Servicio de Desarrollo de las Empresas Públicas Productivas (Sedem) a fin de recibir de manera directa los reclamos de las beneficiarias del subsidio Prenatal-Lactancia y del subsidio Universal Prenatal Por la Vida.
“Estamos solicitando una mesa para poner de manera permanente una o un funcionario a fin de recibir cualquier queja o reclamo”, confirmó la autoridad.
La autoridad señaló que tras realizar operativos sorpresa en las oficinas del SEDEM de Sucre, El Alto y La Paz, hasta la fecha no se han evidenciado las irregularidades que surgieron a través de una denuncia, relacionadas con un supuesto sobreprecio, caducidad de productos o mala calidad de los mismos.
Afirmó que se instalarán los puntos de denuncia cercanos a las beneficiarias para registrar cualquier queja o reclamo, y confirmó que los operativos continuarán en todo el país.
En el caso de la denuncia de sobreprecio en los productos, explicó que se pedirá la lista de productos y precios de cada Sedem del país, ya que son las empresas locales las que ofertan sus productos con diferentes características y precios.
“Queremos contrastar la lista de productos, la lista de precios con los precios del mercado. Vamos a terminar de hacer los verificativos y vamos a entregar un informe nacional, porque no son los mismos productos que se entregan en El Alto a los que se entregan en Sucre o los que se entregan en Santa Cruz. Por ejemplo, en El Alto solo se entrega pollos Imba, en Santa Cruz se puede acceder a pollos Sofía, Imba y otra marca; los productos que se entregan no son todos producidos por una misma empresa, son empresas locales”, explicó.
Manifestó que los productos no son iguales a los que se comercializan en el mercado, debido a que los productos en su mayoría son enriquecidos con vitaminas y otros componentes alimenticios en beneficio de las mujeres gestantes y madres en etapa de lactancia.
“Por ejemplo, nos decían que el yogurt que venden en el subsidio no es el mismo que venden en el mercado formal, donde dos litros pueden tener un precio de 20 bolivianos y un litro de yogurt del subsidio puede costar 14 o 13 bolivianos, la diferencia está en los valores y nutrientes y la calidad del mismo. Por ello es que necesitamos realizar este trabajo para tener un informe a nivel nacional, contrastar los precios y la calidad de estos productos”, sostuvo la autoridad.