Los primeros huevos de titanosaurios fueron encontrados en la década de 1990 en Brasil. Surgió un gran interés al respecto. Hoy, científicos argentinos y brasileños estudiaron el proceso de nidificación. Los restos encontrados datarían de hace más de 80 millones de años. Su estudio nos explica cómo eran los nidos de titanosaurio.
Huevos de titanosaurio
El hallazgo ocurrió en Uberaba, municipio del estado de Minas Gerais, al sudeste de Brasil. Si bien se hizo en la década de 1990, es ahora que se tienen ciertas respuestas. Se publicaron en la revista Scientific Reports del Grupo Nature.
Los titanosaurios eran “el grupo de dinosaurios con las especies más grandes que habitaron la tierra”, apunta Agustín Martinelli. Es el investigador argentino del Conicet que participó en el estudio. Los huevos de dinosaurio miden en promedio 12 centímetros de diámetro. Los hallados en Uberaba llegan a medir hasta 25 de largo.
Lucas Fiorelli es otro de los expertos argentinos. Dice que “existe una limitante física y fisiológica para el tamaño de los huevos. Los titanosaurios habrían sido coloniales y generalistas en sus aspectos reproductivos. Nidificaban en manada en un área enorme, construyendo nidos masivos con decenas de huevos”.
Es posible que, como las tortugas marinas, pudieron tener comportamientos filopátricos. Es decir, regresar a nidificar en los mismos sitios.
Esta especie herbívora habitó todos los continentes durante el Cretácico. En América del Sur estuvo principalmente en Argentina y Brasil. No es la primera vez que la zona de Uberaba aporta un hallazgo clave. En 1951 se encontró el primer fósil correspondiente a la etapa del Cretácico. Correspondía a un huevo esférico de un dinosaurio. Y marcó el inicio de investigaciones arqueológicas dando lugar a cientos de hallazgos fósiles posteriores.
Saber cómo eran los nidos de titanosaurio brinda nuevos enfoques sobre el conocimiento de los huevos fosilizados. Y nos cuenta acerca de rasgos de conducta desconocidos en estos dinosaurios.