Al menos diez personas encapuchadas asaltaron un bus de la empresa Coral en la carretera Oruro a Cochabamba. El suceso tuvo lugar en la bajada de Confital, donde los delincuentes atacaron violentamente la flota, dejando varios heridos y causando daños significativos.
Según relatos de los pasajeros, los asaltantes lanzaron piedras contra el vehículo antes de abordarlo, provocando heridas a algunos pasajeros y sembrando pánico entre los ocupantes. Una vez dentro, procedieron a despojar a los viajeros de sus pertenencias mientras amenazaban con armas de fuego y cuchillos.
El momento del asalto fue capturado en video por una joven pasajera, quien logró documentar la situación de caos y desesperación dentro del bus. Este material fue posteriormente difundido en redes sociales, aumentando la visibilidad y la indignación pública ante el incidente.
“Se escuchaban gritos y llantos, algunas pasajeras pedían ayuda y llamaban a sus familiares para informarles sobre lo que estaba ocurriendo y buscar resguardo”, relató uno de los testigos presentes en el lugar.
Las autoridades locales han iniciado una investigación para identificar a los responsables del asalto y llevarlos ante la justicia. Se espera que se tomen medidas urgentes para garantizar la seguridad de los pasajeros que utilizan este importante medio de transporte entre Oruro y Cochabamba.
La empresa Coral aún no ha emitido un comunicado oficial sobre el incidente, pero se espera que en las próximas horas se pronuncien respecto a las medidas que tomarán para prevenir futuros episodios de violencia en sus servicios.
Este suceso ha vuelto a poner de manifiesto la vulnerabilidad de los pasajeros en rutas interdepartamentales y la necesidad de reforzar la seguridad en estos trayectos, que son vitales para la conectividad y el desarrollo regional.